La ONU confirmó hoy la liberación de 45 “cascos azules” fiyianos que habían sido capturados por un grupo radical islámico el pasado 28 de agosto en los Altos del Golán, en la región fronteriza entre Siria e Israel.
Una nota de la oficina de prensa de la ONU, que confirma informaciones previas del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, señala que los efectivos de la fuerza de paz de Naciones Unidas fueron puestos en libertad a las 14.30 hora local (11.30 GMT).
Los “cascos azules”, que estaban en poder del Frente Al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, fueron entregados a la posición 80 que tiene la fuerza de paz de la ONU en los Altos del Golán.
Esa posición, en el borde occidental de la zona desmilitarizada a cargo de los “cascos azules”, se encuentra cerca de la población de Al Rafid y está al mando de fuerzas de paz filipinas.
“Todos los 45 efectivos de la fuerza de paz están en buenas condiciones y están siendo trasladados a Camp Foar para recibir asistencia médica”, agrega la información de la ONU, sin dar mayores detalles.
Los “cascos azules” integran la Fuerza de la ONU de Observación de la Separación en los Altos del Golán (UNDOF, en inglés), una de las misiones de paz más que llevan más tiempo activas.
Fue creada el 31 de mayo de 1974 a fin de supervisar el acuerdo de Siria e Israel para la retirada de los Altos del Golán y vigilar que se mantiene el cese al fuego acordado entre las partes.
Lo que la ONU ha definido como la “detención” de los “cascos azules” fiyianos se produjo en medio de los conflictos armados entre grupos rebeldes sirios y el régimen de Bachar al Asad.
Además de esta captura, grupos rebeldes impidieron durante varios días los movimientos de decenas de “cascos azules” filipinos y llegaron a atacar dos posiciones de la UNDOF, sin víctimas entre las fuerzas de paz.
Días después de estos hechos, el Frente al Nusra confirmó que tenía en su poder a los militares fiyianos, y recientemente anunció que los iba a liberar pronto, a la vez que pidió la excarcelación de presos en centros de detención del régimen sirio.
Desde que surgió este incidente, la ONU ha venido pidiendo la liberación incondicional de los efectivos de sus fuerzas de paz en los Altos del Golán y ha mantenido bastante reserva en relación con las negociaciones para conseguir su puesta en libertad.