Birmingham. Un hombre con uniforme de la empresa de correos United Parcel Service (UPS) mató a tiros ayer a dos trabajadores y luego se suicidó en una instalación de la compañía en Birmingham, Alabama, informó la Policía.
El incidente ocurrió alrededor de las 9:30 a.m. hora local en una sede de UPS en el vecindario de Inglenook de la ciudad, indicó la Policía.
Los agentes hallaron a las víctimas y al presunto atacante muerto con una herida de bala autoinfligida, comentó el jefe de Policía de Birmingham, A.C. Roper, a periodistas.
Agregó que se trataba de un hombre blanco de unos 45 años.
La Policía no hizo disparos, agregó.
“Cuando estas personas fueron al trabajo hoy, no tenían ni idea de que sería su último día sobre la Tierra”, dijo Roper al periódico local The Birmingham News.
Las identidades de los otros dos fallecidos no se conocen, pero se trata también de empleados de la compañía. Algunos medios de EE. UU. afirmaban que eran supervisores.
El motivo no estaba claro de inmediato, agregó al precisar que el atacante vestía un uniforme de empleado de UPS.
La compañía, la líder mundial de encomiendas, confirmó el incidente y dijo que está colaborando con las autoridades.
El teniente de la Policía, Sean Edwards, informó que el tirador había sido despedido el lunes y se esperaba que ya no volviera a la empresa.
Por qué fue despedido no fue informado por el oficial.
Según publicó la agencia de noticias AP, un funcionario policial, que habló bajo condición de anonimato por que no estaba autorizado a divulgar información, identificó al tirador como Joe Tesney.
Mientras que Bill Wilks, pastor de la iglesia bautista de North Park, dijo que Tesney, su esposa y sus dos niños han sido miembros de la iglesia desde 2003.
Wilks describió a Tesney como “muy preocupado” por su trabajo y por su situación financiera”.
El pistolero, según nydailynews.com, residía en Argo, una ciudad al noreste de Birmingham.
Por su parte, el gobernador de Alabama Robert Bentley, expresó sus condolencias: “nuestros pensamientos y oraciones están con las familias y compañeros de trabajo de las personas que murieron esta mañana”.
“Recursos de seguridad del Estado están disponibles y listos para ayudar si es necesario ya que los investigadores trabajan para determinar la causa de este tiroteo”, agregó.
Los empleados que estaban en el depósito cuando ocurrió el incidente fueron llevados a otro sitio para hablar con los investigadores y con asesores sicológicos, declaró Roper. —AGENCIAS.