El Papa desea beatificación de Romero

Francisco declaró que Romero "era un hombre de Dios" y sugirió que deseaba expandir el concepto de martirio para incluir una mayor amplitud de candidatos

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elsalvador.com

Por AP

2014-08-18 3:00:00

Francisco declaró que Romero “era un hombre de Dios” y sugirió que deseaba expandir el concepto de martirio para incluir una mayor amplitud de candidatosEl papa Francisco abrió el camino para acelerar la beatificación del asesinado arzobispo salvadoreño Oscar Romero por considerar que no quedan problemas doctrinales que lo impidan.

Romero, el arzobispo de San Salvador, fue asesinado de un disparo al corazón en marzo de 1980 cuando oficiaba la misa. Romero solía denunciar la represión de los militares salvadoreños al inicio de la guerra civil (1980-1992). Tenía 63 años.

El prelado alcanzaría la beatificación por ser considerado un mártir. Según sus devotos murió por su fe y defender al pueblo. Sus detractores opinan que no pasó de ser un activista político.

El pontífice dijo el lunes a los periodistas que lo acompañaban de regreso de Corea del Sur que el caso de Romero había sido “demorado por prudencia” por la Congregación pero que ahora quedaría “destrabado” y que el caso había pasado al departamento que decide sobre la santidad de los candidatos. “Es importante que el tema avance rápidamente”, dijo el pontífice, aunque enfatizó que el proceso debe cumplir con sus requisitos.

El proceso de beatificación fue aprobado por el Vaticano en mayo de 2005, cuando la Congregación de la Doctrina de la Fe concluyó que Romero fue “un mártir de la Iglesia, asesinado por su fe cristiana”. Con la entronización del papa Francisco el proceso fue desbloqueado el 22 de abril y ahora avanza.

Francisco declaró que Romero “era un hombre de Dios” y sugirió que deseaba expandir el concepto de martirio para incluir una mayor amplitud de candidatos.

En contraste con los candidatos regulares a la beatificación, los mártires pueden alcanzar el primer paso previo a la santidad sin que se atribuya un milagro a su intercesión. Pero se necesita un milagro para la canonización.

Tradicionalmente, la Iglesia ha restringido la designación de mártir a las personas que murieron a manos de quienes profesaban odio a la fe católica. Francisco propuso que los teólogos estudien para determinar si los que murieron a causa de sus acciones cumpliendo la tarea de Dios también pueden ser considerados mártires.

“Lo que me gustaría es que aclarasen cuándo hay un martirio a causa del odio de la fe -por confesar la fe, como también por hacer el trabajo para el próximo que ordena Jesús”, aclaró el pontífice.

Las cuestiones sobre dicha distinción han orientado el debate teológico acerca de si Romero fue asesinado por un escuadrón de la muerte derechista de El Salvador por profesar la fe o por su activismo político en apoyo de los pobres.

El arzobispo, llamado “la voz de los sin voz”, recibió el disparo mortal cuando oficiaba misa, un día después de pedir a los militares en una homilía: “En nombre de Dios y de este sufrido pueblo les ruego, les suplico, les ordeno, en nombre de Dios, cese la represión”.

Un informe de la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas, creada poco después de los acuerdos de paz, determinó que el autor intelectual del crimen fue el ya fallecido mayor Roberto D’Abuisson, fundador del partido derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), que gobernó el país durante 20 años (1989-2099).

Sin embargo, los responsables del crimen no serán castigados debido a una amnistía promulgada por el gobierno de Arena horas antes de ser divulgado el informe de la Comisión en 1993.