MÉXICO. Unos 1,300 inmigrantes centroamericanos, la mayoría jóvenes, quedaron varados ayer en el sur de México tras descarrilarse el tren de carga conocido como “La Bestia”, que suelen usar en su camino hacia la frontera estadounidense.
La Dirección Estatal de Protección Civil dijo que hasta el momento se desconoce cuántas personas son hombres, mujeres o niños, aunque es común que viajen familias completas.
“Sí, eran unos 1,300 migrantes, todos resultaron ilesos. Lo que sabemos hasta el momento es que en su mayoría son jóvenes”, declaró a Reuters el portavoz de Protección Civil (PC) estatal Luis Velasco.
El ferrocarril provenía de Arriaga Chiapas y se dirigía por abastecimiento de víveres a Ciudad Ixtepec, donde continuaría su camino hasta el Estado de México.
Sin embargo, el percance se reportó en el paraje “Las Palmas” que se localiza entre los municipios de Reforma de Pineda y Unión Hidalgo.
Decenas de miles de centroamericanos arriesgan su vida cada año para llegar a Estados Unidos viajando sobre el techo de “La Bestia”, que tras diversos accidentes ha dejando muertos y gente mutilada.
En abril de este año hubo un percance igual en el que cientos de migrantes quedaron varados en Tenosique, Tabasco, y en Palenque, Chiapas, debido a que maquinistas del ferrocarril “La Bestia” les impidieron subir al tren para continuar con su camino a la frontera con Estados Unidos.
“No sabemos si todos (los migrantes) serán canalizados a algún albergue, puesto que muchos temen ser deportados, prefieren esperar el siguiente tren, aunque por la fuerte lluvia el paso es más lento”, dijo Enrique Cueto, oficial operativo de PC.
El tren se descarriló cerca de las 6:00 de la mañana, al parecer como resultado de fuertes lluvias que han azotado en los últimos días el sur del país. —AGENCIAS.