Gina Mihai, de 34 años, dice haber encontrado en su celular una selfie del espíritu de su difunta abuela, quien al parecer es torturada por una serpiente.
Mihai cocinaba cuando escuchó que su celular había recibido la imagen y como no quería ensuciar el aparacto se lo puso en el bolsillo, “cuando lo saqué, allí estaba la imagen en el teléfono”, detalla la mujer.
“Ella tenía algo parecido a una serpiente alrededor de su cuello, y la imagen entera parecía como si hubiera sido tomada a través de un agujero, como si se hubiera tomado en un desgarro del tejido que separa a los vivos de los muertos”, agregó.
Así, para tratar de conocer el origen de la selfie, Gina visitó a una psíquica, quien le advirtió que su abuela estaba siendo castigada brutalmente en la otra vida.
Según la psíquica, la serpiente en el cuello de la difunta quiere decir que su alma está siendo castigada por los demonios del “más allá”. Entonces, la selfie fue una señal de auxilio suplicando que oren por ella, de tener éxito la abuela de Gina dejará de ser atormentada y disfrutará de la vida eterna en paz.
Gina y otros habitantes de Scurtesti están aterrados, resulta que en Rumanía hay una tradición anual con la que rinden homenaje a sus muertos (parecida al “Día de Muertos” (en países de América Latina), los rumanos asisten al cementerio y dejan ofrendas de comida en las tumbas de sus seres queridos. Pues bien, Gina explica que su abuela murió hace 3 años y desde entonces no le había hecho ofrendas.
Por su parte, Florica Mihai, otra familiar, relató que el sacerdote católico de la localidad les ha recomendado dar limosnas por 40 días seguidos, para compensar todas sus faltas y ayudar a que el alma de la señora Mihai descanse en paz.