El líder de la mayoría demócrata del Senado de EE. UU., Harry Reid, consideró que la bancada republicana en ambas cámaras del legislativo está jugando con la crisis desatada en la frontera con los miles de menores provenientes de El Salvador, Honduras y Guatemala que han entrado sin acompañantes adultos al país.
El senador de Nevada, comparó la apuesta republicana con la Serie Mundial de Póker que se realiza en las Vegas, la ciudad insignia de su estado, donde se mueven las fichas en peligrosas jugadas, como lo estaría haciendo a su criterio el partido republicano con las elecciones de noviembre.
“Durante las últimas dos semanas, los jugadores de póker han llegado a Las Vegas para la Serie Mundial de Póker, el torneo más prestigioso de póker en el mundo. A 2.400 millas de Las Vegas, aquí en Washington, D.C., algunos republicanos del Senado están jugando sus juegos políticos con una crisis humanitaria. Pero en lugar de usar fichas de póker, están usando a niños”, dijo el líder demócrata.
Sus dardos fueron dirigidos al senador de Texas, Ted Cruz, quien ha propuesto que cualquier proyecto de ley tendiente a solucionar la crisis humanitaria debe incluir terminar los beneficios migratorios que ha ofrecido la administración Obama, como el programa de Acción Diferida (DACA) para que menores que llegaron a EE. UU. antes por voluntad de sus padres.
Para Reid, ese alivio migratorio del que se han beneficiado cientos de miles de jóvenes es una acción correcta para ir encontrando medidas para solucionar el complicado tema migratorio; en especial con este grupo por muchos años denominado “soñadores” o “dreamers”, que ahora gozan de un permiso de trabajo y algunos beneficios como obtener licencias de conducir y seguir estudiando en las escuelas y universidades.
Reid instó a legisladores menos explosivos -en especial a aquellos que tienen mayor sensibilidad con el tema migratorio- para contener la retórica fuerte como la del senador texano Ted Cruz.
Pide plan regional
Por su parte el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, considera que los países de la región deben coordinar un Plan de Acción Regional, para afrontar “el drama humanitario de los menores migrantes”.
El máximo representante de la OEA, según consignó un comunicado difundido por la organización hemisférica, cree que el tema de la migración infantil se debe tratar con estricto respeto a los derechos de los menores.
“De manera reiterada, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha sostenido que ningún ser humano es ilegal y que toda persona tiene derecho a migrar y a solicitar y recibir asilo”, acotó el titular de la OEA.
Agrega que “para la CIDH y otros organismos internacionales como el ACNUR resulta sumamente preocupante que esta grave situación humanitaria no se esté abordando desde un enfoque de derechos humanos y de protección de la niñez, lo cual implicaría que la consideración inicial fuese garantizar el acceso a estos niños a procedimientos para la determinación de la condición de refugiados, en vez de verlos como migrantes ilegales”.
Algunos senadores en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EE. UU. señalaron que la OEA se muestra muy celoso con los temas políticos para excluir a EE.UU., pero en crisis como esta, prefiere que EE. UU. lo resuelva cuando parte del problema viene de los países de la región.