Niñas intentan matar a compañera para entrar a culto en internet

Las menores, de 12 años, apuñalaron 19 veces a la víctima para entrar el mundo de "Slender Man". Ahora son juzgadas como adulto y enfrentan condenas de 65 años de cárcel

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elsalvador.com

Por Agencias

2014-06-03 2:00:00

Dos niñas de 12 años son acusadas de apuñalar a compañera de clases y dejarla a un milímetro de la muerte, dijo la Policía.

Anissa Weier y Morgan Geyser enfrentan cargos por intento de homicidio como adultos, después de que llevaron a su amiga al bosque y la apuñalaron 19 veces.

Autoridades dijeron que estuvieron a un milímetro de dañar el corazón de su amiga, quien sobrevivió al ataque y se encuentra en condición estable.

Las dos menores dijeron a los investigadores que cometieron el crimen para unirse al culto del Slender Man, un personaje ficticio.

Las niñas invitaron a su amiga, también de 12 años, a una pijamada el pasado viernes por la noche y la convencieron de ir a un parque cercano donde la atacaron, según las autoridades.

“Fue raro que no sentí remordimiento”, dijo una de las niñas a la Policía.

“La parte mala de mí quería que muriera, y la parte buena quería que viviera”, dijo la otra niña.

El caso ha conmocionado el país, por su ferocidad y la complejidad de la planificación.

Las dos menores son acusadas de intento de homicidio premeditado. Si son condenadas, podrían enfrentar una condena de 65 años de prisión, además de una multa de $500,000.

Ambas niñas dijeron a la Policía que leyeron sobre un personaje ficticio en un webside, conocido como Creepypasta Wiki, donde usuarios postean historias de terror.

Según reportes de US, una de las menores dijo a los oficiales que ellas tenían que matar a alguien para se aceptadas en el “mundo del Slender Man”.

Los documentos de la corte indican que las tres compañeras habían pasado dos día juntas, en una pijamada, y jugando antes del terrible ataque del sábado.

Además, detallaron que al momento que su víctima intentó escapar, las dos chicas le ordenaron que se quedara quieta, esperando que sangrara hasta morir.

Más tarde, un ciclista encontró a la víctima al borde de la muerte.