NICARAGUA. Obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) demandaron al gobernante sandinista, Daniel Ortega, que promueva las condiciones necesarias para que los comicios del 2016 se realicen con “la mayor transparencia posible”, al concluir un diálogo “respetuoso” con el Gobierno.
La Iglesia espera que el Gobierno apoye la realización de “unas elecciones en el 2016 con la mayor transparencia posible para que así el pueblo nicaragüense deje de vivir en esa inquietud de que si son honestas o no son honestas”, afirmó el presidente del CEN, René Sándigo, al dar a conocer los resultados de la reunión con Ortega.
Los obispos han expresado en varias ocasiones junto a otros sectores, su preocupación por las denuncias de fraude electoral que los partidos de oposición han hecho en los comicios celebrados después del 2007, bajo la dirección de un tribunal electoral controlado por el oficialismo.
El gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda) impulsó el año pasado una reforma constitucional -que entró en vigor hace dos meses- que avaló la reelección presidencial sucesiva, que había sido prohibida en 1995, con el objetivo de abrir a Ortega las puertas a una cuarta candidatura en 2016.
En la cita, los religiosos también pidieron al Gobierno que dialogara con sectores que también quieren exponer sus inquietudes, al margen de las buenas relaciones que el Ejecutivo mantiene con los empresarios, uno de sus principales aliados.
Sándigo dijo que el diálogo se desarrolló durante más de cuatro horas en un clima de “altura y respeto” en la sede de la Nunciatura en Managua, y que Ortega escuchó sus inquietudes.
Los jerarcas católicos abogaron, además, por el respeto de los derechos humanos, la libertad de prensa, la no represión “desmesurada” de las protestas por parte de la Policía, y se pronunciaron en contra de la esterilización de mujeres que se realizan “con frecuencia” en los hospitales.
También pidieron revisar la ley de violencia contra las mujeres de 2012, porque “no ha logrado resolver el problema”.
El hecho de que se sienten a hablar “es ya un éxito”, comentó el representante del Vaticano en Nicaragua, Fortunatus Nwachukwu, que medió el diálogo.
En el encuentro que se celebró en la Nunciatura Apostólica, participaron Ortega, la primera dama nicaragüense Rosario Murillo y la hija de ambos Camila Ortega. Los 3 abandonaron la Nunciatura sin brindar declaraciones a los medios.
Por parte de la Iglesia estuvieron la mayoría de los obispos, entre ellos los cardenales Leopoldo Brenes y el cardenal emérito Miguel Obando, quien fue invitado por Ortega a participar. —AGENCIAS.