WASHINGTON. Unos 27 activistas e inmigrantes, incluidos siete menores de edad, fueron arrestados ayer tras interrumpir el tránsito en una intersección aledaña al Congreso estadounidense para pedir una reforma migratoria y el fin de las deportaciones.
La protesta fue el segundo acto de desobediencia civil realizado esta semana en la capital estadounidense por organizaciones propulsoras de una reforma migratoria y de detener inmediatamente las deportaciones, cuyo promedio diario se ubica en torno a las 1,100.
Los manifestantes corearon consignas, se tomaron de los brazos y se sentaron en el pavimento durante un torrencial aguacero hasta que la policía los rodeó, los esposó y los fue subiendo en camionetas uno a uno. Un portavoz de la policía del Congreso confirmó que los arrestos ascendieron a 27.
El más joven de los arrestados fue Jorge Servín, de 11 años, quien atribuyó su decisión de participar a sus ganas de demostrar que los niños “podemos hacer cosas importantes, como esta de hoy. No quiero que haya más niños creciendo sin el cariño de sus padres”.
El promedio anual de deportaciones alcanzó la cifra sin precedentes de 400 mil desde que Obama asumió el poder en 2009.
El Congreso mantiene en el limbo la reforma migratoria, mientras la Casa Blanca contempla la posibilidad de ajustarla a través de una acción ejecutiva. —AGENCIAS