Washington. Una serie de tornados golpearon este fin de semana los estados de Arkansas, Oklahoma y Iowa, en Estados Unidos, lo que provocó la muerte de 18 personas y daños a casas, inmuebles y vehículos.
El estado de emergencia declarado por el gobernador de Arkansas, Mike Beebe, en los condados de Faulkner, Pulaski y White permite la movilización de personal, equipos y fondos del Estado para ayudar en la remoción de escombros y el socorro a las víctimas.
El departamento de gestión de emergencias de Arkansas informó de 15 muertes debido al paso de los tornados, en tanto se reportan otras dos muertes en el estado de Oklahoma y medios de prensa informan de otra víctima mortal en Iowa.
“Ahora todo es un caos”, dijo James Firestone, alcalde de la localidad de Vilonia, en Arkansas, a la cadena CNN.
El centro de esa ciudad “parece como si hubiera sido completamente nivelado. Hay unos pocos edificios parcialmente en pie, las cañerías de gas con grandes pérdidas(…) Hemos tenido víctimas”, agregó.
Unos 30 mil hogares se encuentran sin electricidad luego del paso de los tornados.
Autoridades en Carolina del Norte dijeron que el domingo por la mañana que un niño de 11 meses lesionado por un tornado el viernes por la noche murió el domingo en un hospital.
Mientras los equipos de rescate buscan sobrevivientes entre los escombros, los meteorólogos extendieron las alertas de tornado a otras regiones de Arkansas, Luisiana, Misisipi, Texas, Misuri y Tennessee.
Las advertencias de tormenta alcanzan también al valle del río Ohio, en zonas de Illinois, Indiana y Kentucky.
El Servicio Meteorológico Nacional indicó que la amenaza de otras tormentas y tornados ha disminuido en casi todo Arkansas, aunque persiste un riesgo de esos fenómenos en los condados orientales sobre las riveras del Misisipi.
El presidente Barack Obama, quien se encuentra en Filipinas, en una gira asiática que comenzó la semana pasada, envió un mensaje de condolencia a todos los afectados por los tornados, e indicó la disposición del Gobierno Federal para suministrar la ayuda que sea necesaria.
El director de la Agencia de Emergencias de Arkansas, David Maxwell, dijo a los medios que no se sabe cuántas personas seguían desaparecidas ayer por la mañana y que las cuadrillas de socorro van cuidadosamente casa por casa.
El tornado más grave ocurrido en EE. UU. desde 1980, de categoría EF5, se produjo el 22 de mayo de 2011 y, con vientos de 320 kilómetros por hora, dejó a su paso 151 muertos, 900 heridos y 44 desaparecidos en la ciudad de Joplin (Missouri).
Ese tornado destruyó una franja de diez kilómetros de longitud y un kilómetro de ancho y ocasionó pérdidas por $3,000 millones, tras dañar 8,000 viviendas. —AGENCIAS