CARACAS. La inflación anualizada de Venezuela, de las más altas del mundo, repuntó en febrero a un 57.3 % en medio de la mayor ola de protestas contra el Gobierno en una década, informó ayer el Banco Central de ese país.
“Estos resultados se observan en un contexto en el que la actividad económica se vio impactada por eventos perturbadores, derivados de la guerra económica, con consecuencias en la distribución de los productos de consumo masivo”, matizó el Banco Central de Venezuela (BCV) en un comunicado.
La inflación anualizada ha trepado casi 35 puntos en 12 meses, pese a las promesas del Gobierno de domar la inflación.
Las protestas contra el Gobierno bloquearon carreteras y obligaron a cerrar comercios, lo que afectó la distribución y agravó el desabastecimiento que castiga a los venezolanos en el último año.
Maduro está bajo presión para estabilizar los precios y revivir el crecimiento económico en medio de la escasez de productos básicos desde la leche hasta el papel higiénico, uno de los detonantes de las protestas en distintas ciudades del país. Pero en el informe de ayer del BCV no incluía el indicador de febrero sobre la escasez.
La inflación es también atizada por una fuerte expansión del suministro de dinero. La liquidez aumentó un 70 por ciento en 2013, pese a que la economía creció un 1.6 por ciento y el suministro de dinero se ha duplicado desde noviembre de 2012.
Para el Banco Central la inflación en febrero se desaceleró hasta un 2.4 %, ya que en enero fue de 3.3 %.
“Dicho descenso de la variación intermensual obedeció, fundamentalmente, a la notable desaceleración observada en el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas, de 4.3 por ciento a 1.7 por ciento”, dijo la entidad.
Sin embargo, siete segmentos registraron una aceleración de precios en febrero: transporte; bienes y servicios; vestido y calzado; equipamiento del hogar; servicios de educación; salud; y esparcimiento y cultura. —AGENCIAS.