Papa arremete contra los “mercaderes de carne humana”

El Papa Francisco pidió poner fin al tráfico humano y respetar a los refugiados e inmigrantes del mundo entero.

descripción de la imagen
La ruta 2 y 2C han paralizado labores en varias ocasiones por extorsiones. Foto EDH / ArchivoLos empresarios del transporte público aseguran que los mecanismos de extorsión no han variado: hacen uso de la amenaza, intimidación, asesinatos y tiroteos. Foto EDH / Archivo

Por

2014-01-19 7:00:00

CIUDAD DEL VATICANO. El Papa Francisco pidió ayer acabar con “los mercaderes de carne humana que quieren esclavizar a los inmigrantes y refugiados” durante el discurso que precede al tradicional Ángelus que celebra cada domingo, en alusión al Día Internacional del Inmigrante, celebrado ayer.

Explicó que esa efeméride este año se celebra bajo el lema: “Migrantes y refugiados, hacia un mundo mejor” y dirigió un especial saludo a las representaciones de diversas comunidades étnicas presentes en la plaza.

“Queridos amigos, ustedes están cercanos al corazón de la Iglesia porque la Iglesia es un pueblo en camino hacia el reino de Dios, que Jesucristo ha traído en medio de nosotros. ¡No perdáis la esperanza de un futuro mejor!” , exclamó.

En este sentido, agradeció a “todos aquellos que trabajan con los inmigrantes para defenderlos de los que el Beato Scalabrini denominó ‘mercaderes de carne humana'”.

“En estos momentos pensamos en tantos refugiados, en su sufrimiento, su vida, sin trabajo y sin documentos”, recordó el pontífice para, después, pedir a la gente que abarrotó como cada domingo la plaza de San Pedro, dirigir una oración hacia estas personas que “viven situaciones graves y difíciles”.

A ellos, a las personas que padecen esta situación, el Papa instó a dar constancia de “los valores de sus culturas de origen” y “a vivir en paz en los países que les acogen”.

Entonces invitó a todos a dirigir una oración por los migrantes y los refugiados que viven las situaciones “más graves y más difíciles” . La multitud pronunció, con él y en voz alta, un Ave María. —AGENCIAS.