MOSCÚ. Un avión Boeing 737 se estrelló al aterrizar ayer en la ciudad rusa de Kazan, provocando la muerte de las 50 personas que viajaban a bordo y subrayando los malos antecedentes de seguridad de las aerolíneas rusas que deben volar las rutas internas del país más grande del mundo.
El Boeing 737 de la compañía Tatarstan Airlines efectuaba un segundo intento de aterrizaje cuando tocó la superficie de la pista cerca de la torre de control, y la aeronave “quedó destruida y se incendió”, dijo Sergei Izvolky, portavoz de la agencia aeronáutica rusa.
Una portavoz del Ministerio de Emergencias, Irina Rossius, dijo que no hubo sobrevivientes en el vuelo que partió de Moscú y en el que iban 44 pasajeros y seis miembros de la tripulación.
El ministerio difundió la lista de fallecidos, entre los cuales estaba Irek Minnikhanov, hijo del gobernador de Tartaristán, y Alexander Antonov, que dirigía la rama en Tartaristán del Servicio de Seguridad Federal, la principal agencia sucesora de la KGB de la era soviética.
Imágenes mostraban restos quemados dispersados en una amplia área, aparentemente tomadas después de que los bomberos extinguieron las llamas. La televisión rusa transmitió un video borroso que mostraba un flash de luz. También publicó una imagen del fuselaje abierto del avión con bomberos al frente.
El vuelo U363 despegó desde el aeropuerto Domodedovo de Moscú a las 18:25 (hora local) y se estrelló poco más de una hora después, dijeron funcionarios de emergencia. El avión tenía 23 años de antigüedad.
Según reportes locales, el Boeing perdió altitud rápidamente y su tanque de combustible explotó al momento del impacto.
Había fuertes vientos y temperaturas sobre cero en el aeropuerto en el centro de Rusia. Los vuelos hacia y desde el aeropuerto fueron suspendidos.
Rusia y las exrepúblicas soviéticas combinadas tienen uno de los peores antecedentes de seguridad de tráfico aéreo en el mundo, con una tasa total de accidentes casi tres veces mayor al promedio mundial en el 2011, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo.
El primer ministro Dmitry Medvedev dijo el domingo que el desastre era “una tragedia aterradora”, ofreciendo sus condolencias a los familiares de las víctimas en un mensaje en la red social Twitter.
El presidente ruso, Vladímir Putin, y el primer ministro, Dmitri Medvédev, expresaron sus condolencias a los familiares de las víctimas y ordenaron al titular de Transporte desplazarse con urgencia a Kazán y crear una comisión de investigación.
Rosaviatsia, la Agencia Federal de Transporte Aéreo, ha abierto ya una investigación sobre las operaciones de “Tatarstán”, aerolínea fundada en 1999 y que realiza vuelos nacionales e internacionales a ciudades como Praga, Estambul, Baku o Taskent.
Por su parte, la empresa estadounidense Boeing informó a RIA-Nóvosti que, en cuanto conozca en detalle las circunstancias de la catástrofe, tomará una decisión sobre la participación de sus expertos en la correspondiente investigación.
El accidente aéreo más grave de los últimos años en territorio ruso tuvo lugar en abril de 2010, cuando el avión Tu-154 en el que viajaba el entonces presidente polaco, Lech Kaczynski, y otras 95 personas se estrelló en un aeródromo de la ciudad de Smolensk.
Además, 44 personas murieron en 2011 cuando el Yak-22 en el que viajaba un equipo de hockey sobre hielo cayó poco después de despegar en la ciudad de Yaroslavl, mientras otras 31 murieron en 2012 en circunstancias similares en el norte de Siberia.
—AGENCIAS.