Exrebeldes liberan al primer ministro de Libia tras breve secuestro

El funcionario habría permanecido retenido varias horas en represalia por el papel del Gobierno en la captura por parte de fuerzas estadounidenses de un sospechoso de al Qaeda en Trípoli

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elsalvador.com

Por Reuters

2013-10-10 9:50:00

Hombres armados miembros de una antigua facción rebelde liberaron el jueves al primer ministro de Libia, luego de mantenerlo retenido varias horas en represalia por el papel del Gobierno en la captura por parte de fuerzas estadounidenses de un sospechoso de al Qaeda en Trípoli, dijeron funcionarios.

“El primer ministro ha sido liberado”, confirmó un integrante del Gobierno. Una fuente de seguridad también informó que Ali Zeidan estaba libre.

Un periodista de Reuters en el lugar pudo ver a Zeidan luego arribando a su oficina.

El primer ministro había sido capturado al amanecer en un hotel de lujo donde vive bajo una estricta seguridad y fue retenido durante casi seis horas en el edificio del Ministerio del Interior por un grupo que había sido contratado por el Gobierno para ofrecer seguridad en Trípoli.

Dos años después de una revolución que derrocó a Muammar Gaddafi tras 42 años en el poder, Libia está hundida en el caos, con un Gobierno central vulnerable y unas fuerzas armadas incipientes que tratan de contener a milicias tribales rivales y a extremistas islámicos que controlan partes del país.

La milicia dijo que “arrestó” a Ali Zeidan después de que el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, confirmó el papel de Libia en la captura el fin de semana en la capital de Abu Anas al-Liby.

“Este arresto ocurre después de que … (Kerry) dijera que el Gobierno libio estaba al tanto de la operación”, dijo a Reuters un portavoz del grupo, conocido como Sala de Operaciones de los Revolucionarios de Libia.

Antes de su liberación, un funcionario del departamento contra el crimen del Ministerio del Interior dijo a la agencia de noticias estatal que Zeidan, un ex diplomático y activista opositor a Gaddafi exiliado, estaba siendo retenido allí y que era bien tratado.

El primer ministro, que accedió al cargo el año pasado, fue capturado en el Hotel Corinthia, donde viven muchos diplomáticos y funcionarios de alto rango. Es considerado uno de los lugares más seguros de Trípoli.

El secuestro, aunque breve, aumenta los riesgos en el país miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), donde las facciones regionales también buscan el control de su riqueza petrolera, que aporta a Libia la mayor cantidad de los ingresos del Gobierno.

TRANSICIÓN CONFLICTIVA

Luego de las revueltas de la Primavera Árabe que derrocaron a varios líderes autocráticos, la transición libia ha sido una de las más conflictivas.

El país aún no tiene Constitución, Zeidan enfrenta un posible revés en una votación de confianza y su Asamblea de transición está paralizada por divisiones entre la secular Alianza de Fuerzas Nacionales y los Hermanos Musulmanes.

Zeidan, considerado un liberal opuesto a los islamistas radicales, ha tenido problemas para cumplir con su promesa de “limpiar” las milicias rivales constituidas por ex rebeldes, que suelen enfrentarse en las calles de Trípoli y en la ciudad petrolera de Bengasi para intentar imponerse por la fuerza.

El ministro de Defensa libio renunció en junio luego de que milicias sitiaran dos ministerios. Otro grupo de manifestantes armados bloqueó puertos petroleros del este del país los últimos dos meses, lo que redujo a la mitad la producción de crudo nacional.

Una mezcla de trabajadores en huelga, milicias y activistas políticos han bloqueado las plantas petroleras libias y los puertos durante más de dos meses, según el ministro de Petróleo, Abdelbari Arusi, lo que generó más de 5,000 millones de dólares en pérdidas.

El 2 de octubre, funcionarios dijeron que las exportaciones de petróleo podrían retomar su capacidad plena en días una vez finalizadas las huelgas.

Repsol y Eni, implicadas en el oeste de Libia, han visto restaurada la producción desde que las plantas reabrieron el mes pasado. Pero las empresas que invirtieron en el este de Libia están entrando en el tercer mes de cierres en varias terminales de exportación importantes.

Las fuerzas especiales de Estados Unidos detuvieron el sábado a Nazih al-Ragye -conocido por su alias Abu Anas al-Liby-, sospechoso libio de los atentados de 1998 contra las embajadas estadounidenses en Kenia y Tanzania.

Liby permanece detenido en un barco de la Armada estadounidense en el Mediterráneo.

El Departamento de Estado de Estados Unidos estaba revisando las informaciones del secuestro de Zeidan y estaba “en contacto con funcionarios estadounidenses y libios en el terreno”, dijo la portavoz Jen Psaki en Brunei, donde Kerry está de visita oficial.

El grupo que se atribuyó el secuestro había recibido el encargo de parte del Ministerio del Interior de ofrecer seguridad en la capital libia como parte de un programa para reintegrar a ex combatientes.

Guardias del hotel donde lo capturaron dijeron que no hubo disparos ni enfrentamientos durante el incidente.