BAGDAD. Un atacante suicida estrelló ayer un vehículo cargado de explosivos contra una cafetería llena de clientes en la capital de Iraq, parte de una jornada de violencia que dejó 45 muertos en todo el país, según las autoridades.
El atentado contra el establecimiento tuvo lugar en el vecindario Amil, predominantemente chií, de Bagdad. La cafetería y un establecimiento cercano de jugos son lugares favoritos de reunión entre personas jóvenes que colmaban la zona al momento de la explosión.
El estallido del coche bomba dejó 35 muertos y 45 heridos, dijeron las autoridades.
La violencia se ha incrementado en Iraq después de que las fuerzas de seguridad reprimieron en abril un campamento de protestas suní con saldo de varios muertos en el poblado norteño de Hawija.
Al menos 385 personas han muerto en diversos atentados en lo que va del mes en Irak, de acuerdo con el conteo de The Associated Press
En una aldea al norte de Bagdad, un coche bomba estalló y tuvo como blanco la casa de un policía; murieron el padre del policía, un hermano y cinco sobrinos, dijeron las autoridades. Otras seis personas resultaron heridas por la explosión, que ocurrió cuando el oficial no se encontraba en la casa.
Por su parte, las fuerzas de seguridad frustraron un ataque contra el consejo local del poblado occidental de Rawa que pretendían perpetrar cinco atacantes suicidas que llevaban explosivos e iban disfrazados de policías, dijo Muthana Ismail, jefe de la comisión local de seguridad.
Ismail dijo que dos de los agresores fueron baleados mientras que los demás se volaron con los explosivos. Dos agentes de la policía y un funcionario perdieron la vida, en tanto que 20 personas resultaron lesionadas, agregó.
Rawa se ubica a unos 330 kilómetros (200 millas) al noroeste de Bagdad. —AP