Una nueva polémica vuelve a poner a prueba la endeble relación entre Venezuela y Estados Unidos, indica una publicación del periódico español El País, en relación a la acusación de Caracas contra Washington de impedir que el avión que lleva a Nicolás Maduro a China sobrevolara Puerto Rico y que ayer fue desmentido por EE.UU.
La portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, afirmó que sí se había concedido la autorización a Venezuela a pesar de no cumplir con los requerimientos en la solicitud, como por ejemplo que no se trata de un avión oficial y que no pidieron permiso con antelación.
Eso en respuesta a la denuncia del canciller venezolano, Elias Jaua, quien el jueves afirmó que Washington no permitía que el avión presidencial venezolano —que en realidad es una aeronave de Cubana de Aviación— sobrevolara Puerto Rico en su ruta hacia China, donde Maduro iniciará hoy una visita oficial de 12 días.
Temprano Maduro había amenazado con tomar “medidas drásticas” por el impedimento de EE.UU.
Sin embargo, el Gobierno de Puerto Rico también confirmó ayer que las autoridades de EE.UU. sí dieron el permiso para que la aeronave en la que viajaba el presidente venezolano sobrevolara la isla.
La denuncia venezolana, desmentida por EE.UU., desató la solidaridad de partidos independentistas y soberanistas de Puerto Rico.
La otra denuncia
Además Venezuela denunció ayer intentos estadounidenses de obstruir la entrada de Maduro a Nueva York, donde se celebrará la Asamblea General de la ONU.
En una carta enviada al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el Gobierno venezolano señala que EE.UU. ha creado “barreras logísticas que podrían impedir la visita” de Maduro la semana próxima a Nueva York.
Esto también fue desmentido por el Departamento de Estado de EE.UU. —AGENCIAS