BRASIL. Unas siete personas murieron al derrumbarse ayer un edificio de dos pisos en construcción en la ciudad brasileña de Sao Paulo, según el Cuerpo de Bomberos, que ha rescatado hasta el momento a 26 personas del lugar del accidente.
Los rescatistas buscaban ya entrada la noche señales de vida entre una gran masa de bloques de hormigón, vigas rotas y madera, que el capitán del Cuerpo de Bomberos Marcos Palumbo describió como “casi un laberinto”.
Los bomberos mantuvieron contacto visual y verbal con dos personas bajo los escombros, que lograron sacar.
Lo mismo ocurrió con un hombre de 24 años que llamó a los bomberos desde su celular y que los orientó sobre el lugar donde se encontraba, bajo dos losas de concreto.
Tenía las piernas atrapadas bajo los escombros, pero los socorristas lograron rescatarle, informó el Cuerpo de Bomberos.
Palumbo dijo que han sacado cinco cadáveres y tienen localizados otros dos cuerpos atrapados entre los restos de la estructura del edificio.
El capitán alertó de que el número de muertos puede aumentar, dado que hay áreas que aún no han registrado.
Unas 35 personas trabajaban en la obra cuando ocurrió el accidente, según las autoridades.
“Trabajaban de forma normal, no hubo ningún ruido, simplemente el colapso de forma repentina” de la estructura, explicó a los medios Anderson Lima de Oliveira, el coordinador que dirige a los Bomberos en el rescate, y que desplazó al lugar de los hechos a 23 vehículos, unas 70 personas, dos helicópteros y equipos con perros. Además están desplegados alrededor de 60 policías militares.
El hundimiento del edificio, que iba a alojar una tienda de la red de moda Magazine Torra Torra, ocurrió a las 8:35 a.m. hora local en el barrio de São Mateus, en la zona este de Sao Paulo.
La caída de la construcción alcanzó también a algunas de las casas cercanas, construcciones de una planta. Defensa Civil anunció que inspeccionaría las edificaciones colindantes para cerciorarse de que no sufrieron daños.
Los derrumbes de edificios en obras o muy viejos y mal mantenidos ocurren con relativa frecuencia en Sao Paulo, una de las 12 sedes de la Copa del Mundo de fútbol de 2014, y en otras ciudades de Brasil.
Las autoridades aún no han adelantado una posible causa del accidente. En el lugar hubo anteriormente una gasolinera, pero los bomberos no han especulado sobre si ese hecho fue un factor en el accidente.
Vecinos del lugar comentaron que en el momento del desplome había pocos transeúntes en esa calle de comercios, lo que evitó que la tragedia haya sido peor. —AGENCIAS