Papa Francisco: “Jóvenes, vayan sin miedo a servir”

Durante su misa de despedida de la Jornada Mundial de la Juventud 2013, en Copacabana, el pontífice pidió a los jóvenes del mundo recuperar los valores y evangelizar

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elsalvador.com

Por Roger Herrera Enviado Especial de El Diario de Hoy y Radio Paz/Agencias

2013-07-28 7:00:00

Más de tres millones de jóvenes amanecieron en la Playa de Copacabana para participar en la misa con la que se despediría el Papa de la Jornada Mundial de la Juventud 2013.

Durante su mensaje el Santo Padre hizo un llamado a los peregrinos a que lleven el Evangelio “para arrancar el mal y la violencia, demoler las barreras del egoísmo, la intolerancia y el odio y edificar un mundo nuevo.

“Queridos jóvenes, llevar el Evangelio es llevar la fuerza de Dios para arrancar y arrasar el mal y la violencia; para destruir y demoler las barreras del egoísmo, la intolerancia y el odio; para edificar un mundo nuevo”, les dijo en la misa de clausura de la JMJ.

El Pontífice pidió a los jóvenes católicos que “no tengan miedo” y que anuncien el Evangelio por todo el planeta, “ya que el mundo tiene necesidad de Cristo”.

“No tengan miedo de ir y llevar a Cristo a cualquier ambiente, hasta las periferias existenciales, también a quien parece más lejano, más indiferente. El Señor busca a todos, quiere que todos sientan el calor de su misericordia y de su amor”, afirmó el Obispo de Roma.

Y añadió: “Jesucristo cuenta con ustedes, la Iglesia cuenta con ustedes, el Papa cuenta con ustedes. Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos”.

El Papa agregó que el mandato no nace de la voluntad de dominio o de poder, sino de la fuerza del amor.

“Jesús no nos trata como a esclavos, sino como a hombres libres, amigos, hermanos, y no solo nos envía, sino que nos acompaña, está siempre a nuestro lado en esta misión de amor”, aseguró.

Jesucristo, la iglesia y “el Papa cuenta con ustedes” en esa misión, añadió el santo padre arrancando vivas de entre la multitud.

“Ser misioneros es una tarea en la que “no hay fronteras, no hay límites: (Jesús) nos envía a todos”, agregó el primer Papa latinoamericano.

El mensaje principal del papa en la Jornada se ha dirigido a los miembros de la Iglesia y a la juventud: salir a las calles para recuperar valores y evangelizar.

Asimismo, durante la ceremonia el Pontífice anunció que la próxima Jornada Mundial de la Juventud en 2016 será en Cracovia, Polonia, al concluir la Eucaristía en la playa.

“Pidamos por la intercesión materna de María, la luz del Espíritu Santo para el camino que nos llevará a esta nueva etapa de gozosa celebración de la fe y el amor de Cristo”, expresó Francisco añadió Francisco.

Con los obispos

Más tarde el Obispo de Roma habló con los delegados de la Conferencia Episcopal Latinoamericana, a quienes les instó a hacer conciencia sobre cómo cumplen su labor y se acerquen a lo que denominó la “revolución de la ternura”. Les instruyó además a cambiar su conducta y transformar la Iglesia, siendo hombres que amen la pobreza y que no tengan sicología de príncipes o que sean ambiciosos.

Para Francisco, los cambios de estructuras de la Iglesia “de caducas a nuevas” no son producto de un estudio de organización, sino de ser misioneros.

Posteriormente el Santo Padre agradeció a los 60 mil voluntarios que ayudaron a organizar la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud, a quienes les pidió que sean “revolucionarios” y que rechacen la cultura de lo provisional que impide que las personas se comprometan para siempre.

“Hasta pronto”

Mario Bergoglio se despidió de Brasil tras una semana de visita para participar en la JMJ, con un sentimiento de “saudade”, una palabra portuguesa que describe la nostalgia.

Antes de abordar el avión en el Aeropuerto de Galeao, desde donde regresó a Roma, pidió al pueblo que lo recibió durante la última semana que rezara por él.

“El Papa se va, les dice ‘hasta pronto’, un ‘pronto’ ya muy nostálgico, saudoso, y les pide por favor que no se olviden de rezar por él. Este papa necesita la oración de todos ustedes”, expresó Francisco.

El carismático Pontífice enardeció a multitudes de católicos a su paso por Brasil

“En este momento comienzo a sentir un inicio de saudade. Saudade de Brasil, este pueblo tan grande y de gran corazón. Saudade de la sonrisa abierta y sincera que he visto en tantas personas”, expresó.

Al despedirse en el aeropuerto, encargó esa misma misión a los millares de jóvenes que llegaron desde 175 países para la jornada.

“Muchos de ustedes han venido a esta peregrinación como discípulos; no tengo duda de que todos se marchan como misioneros”, expresó.