El presidente estadounidense, Barack Obama, nombrará el lunes a su asesor Jason Furman como nuevo economista jefe de la Casa Blanca, dijo un funcionario del Gobierno.
Furman, quien reemplazará al economista Alan Krueger como presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca (CEA por su sigla en inglés), tiene un doctorado en economía de la Universidad de Harvard y ha asesorado a Obama desde su campaña electoral del 2008.
El futuro economista jefe de Estados Unidos ha sido fundamental en el diseño de políticas sobre impuestos, en la respuesta a la recesión estadounidense, la formulación de una reforma al sistema de salud y esfuerzos para evitar un “abismo fiscal” a fines del año pasado.
“Furman ha sido un asesor clave para el presidente y ha contribuido en casi todas las grandes propuestas sobre empleos y la economía”, dijo el funcionario de la Casa Blanca que prefirió no ser identificado. Obama realizará su nombramiento a las 14:10 hora del este de Estados Unidos.
Krueger, quien fue confirmado como presidente del CEA en noviembre del 2011, retomará su puesto de profesor en la Universidad de Princeton, en el que ha estado de licencia.
Actualmente Furman es asistente del presidente en política económica y vicedirector principal del Consejo Nacional Económico (NEC por su sigla en inglés) de la Casa Blanca, que está dirigido por Gene Sperling, y fue economista en la administración de Bill Clinton.
Cuando el ex director del NEC Larry Summers dejó la administración a fines del 2010, Furman fue considerado un posible reemplazo, pero el puesto finalmente quedó en manos de Sperling.
El CEA asesora al presidente sobre política económica doméstica e internacional en base a datos e investigación económica. El titular del consejo es un miembro del Gabinete y requiere la confirmación del Senado.
Excolegas dijeron que Furman será eficiente debido a su buena relación con el presidente y el personal de la Casa Blanca.
Su designación probablemente sea una señal de que las disputas con el Congreso por el presupuesto y los impuestos continuarán jugando un rol importante en la política económica del Gobierno. También podría elevar el perfil del CEA dentro de la misma Casa Blanca.