CARACAS. El presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro, alertó ayer al mandatario estadounidense, Barack Obama, de que “funcionarios del Pentágono y de la CIA” están detrás de planes para asesinar al candidato opositor, Henrique Capriles, junto a los ex embajadores Roger Noriega y Otto Reich.
“Yo le hago un llamado al presidente Barack Obama desde aquí, al Gobierno de los Estados Unidos responsablemente (…) Roger Noriega, Otto Reich, funcionarios del Pentágono y de la CIA están detrás de un plan para asesinar al candidato presidencial de la derecha venezolana para crear un caos en Venezuela”, ha señalado.
En una entrevista con el ex vicepresidente y periodista José Vicente Rangel transmitida ayer por el canal privado Televen, Maduro dijo que tiene “información de muy buena fuente” de que estos planes tienen por objetivo “echarle la culpa al Gobierno bolivariano y crear un caos en Venezuela”.
Todo, ante las elecciones que se celebrarán el próximo 14 de abril para elegir al sucesor del expresidente Hugo Chávez, que falleció el pasado día 5 por un cáncer que le afectó durante casi dos años.
El miércoles, el presidente encargado ya denunció planes “de la ultraderecha” estadounidense vinculados al grupo de Noriega, exembajador de EE.UU. ante la Organización de Estados Americanos, y Reich, exembajador de EE.UU. en Venezuela, para atentar contra Capriles.
“Nosotros vamos a garantizar y así lo hemos ordenado y así se está haciendo toda la protección para todos los candidatos presidenciales, particularmente a este”, reiteró Maduro al indicar que “hay sectores de la derecha venezolana involucrados en estos planes”.
Mala imitación de Chávez
Por su parte, Capriles dijo en otra entrevista publicada ayer en el diario El Nacional que el presidente encargado es una mala imitación de Chávez. “Siento que el presidente tenía su proyecto. Nicolás es una mala imitación del expresidente. No creo que Nicolás tenga idea de a dónde quiere llevar al país”, ha afirmado.
Según Capriles, la diferencia entre Chávez y Maduro “está a la vista”. “A mí no me contenta la muerte de nadie. La conexión emocional sigue existiendo con Chávez y es lógico que sea así. Chávez fue mi adversario, pero yo no soy de tener enemigos”, indicó al recordar que enfrentó al exmandatario el año pasado en las elecciones del 7 de octubre.
Capriles ha criticado a Maduro por “darle uso electoral a la muerte” de Chávez y por “mentirle burdamente al país durante los últimos meses” sobre la enfermedad del gobernante.
Más tarde, Capriles volvió a retar a Maduro a un debate al tiempo que se comprometió a aumentar un 40 % el salario mínimo de ser elegido presidente. “¿Verdad que el país se merece un debate? Pero los cobardones no van a debates. Vamos a un debate, no se escondan, el pueblo quiere debate!”, exclamó Capriles en un mitin en el estado Falcón (noroeste) siguiendo con la “cruzada” que ayer inició por dos estados del país.
Días atrás, Capriles ya manifestó su voluntad de debatir con Maduro, quien puso como condición que el líder opositor se disculpara ante el país y la familia del difunto Chávez por haber puesto en duda la fecha de su muerte.
Capriles ha expresado en repetidas ocasiones sus disculpas, pero Maduro no ha respondido aún a su petición a falta de 28 días para los comicios que definirán al sucesor de Chávez, que murió el pasado 5 de marzo por un cáncer.
“Gano la presidencia y voy a decretar un aumento del salario mínimo por lo menos del 40 %”, prometió Capriles.
El opositor dijo que está obligado a hacerlo para que los venezolanos puedan “recuperar el poder adquisitivo” tras el “paquetazo” que el Gobierno impuso a los venezolanos con la devaluación del 31.7 % del bolívar el 8 de febrero. —AGENCIAS.