Con casi 60 años de trayectoria de la marca desde su fundación en El Salvador, Sherwin-Williams de Centroamérica continúa comprometiéndose en ofrecer productos y servicios innovadores y de alta calidad, siguiendo el enfoque “todo inicia y todo termina con el cliente”.
Para lograrlo, el pasado 20 de febrero de 2017, la empresa se hizo acreedora de una doble certificación del Sistema de Gestión de la Calidad (ISO 9001:2015) y del Sistema de Gestión Ambiental (ISO 14001:2015) por parte del organismo alemán de certificación DQS, convirtiéndose en la primera empresa en la región centroamericana en tener un Sistema Integrado de Gestión (SIG) que combine ambas normas en su versión 2015.
El Sistema de Gestión de la Calidad (ISO 9001:2015) busca que los procedimientos, documentos, actividades y recursos de una compañía funcionen como un conjunto de procesos orientados a la satisfacción del cliente; por otro lado, el Sistema de Gestión Ambiental (ISO 9001:2015), unifica los objetivos ambientales de la organización hacia una eliminación, disminución o control del impacto ambiental generado en sus procesos. Esto significa que, con la integración e implementación de estas normas, Sherwin-Williams de Centroamérica confirma su capacidad de desarrollar, producir y comercializar productos que brinden mayor satisfacción al cliente y que al mismo tiempo cuiden del medio ambiente.
Alcanzar este logro no solo significa ahorro de tiempo y costos, prevención de errores e incremento de beneficios, para Sherwin-Williams de Centroamérica, las implicaciones de obtener una doble certificación ISO encajan perfectamente con el marco cultural y los valores corporativos de la compañía, significan encaminarse hacia una incansable mejora continua y al cumplimiento de sus compromisos como empresa, con su personal, con sus clientes y con la sociedad.
Más que una fábrica de pinturas
Para dar cumplimiento a sus compromisos, a nivel corporativo Sherwin-Williams de Centroamérica está fuertemente involucrado con actividades que promuevan la cultura, la educación y a la gente. Esta labor la lleva a cabo promoviendo la formación profesional constante de sus empleados; ofreciendo valores agregados que brinden mayores beneficios al consumidor; apoyando organismos como el Comité Olímpico, Teatro Nacional de Santa Ana, Museo Tin Marín y Colegio de Arquitectos, entre otros; y apadrinando escuelas, jóvenes del programa Joven con valor y otras instituciones dedicadas a la educación. Además, como parte de su responsabilidad ambiental empresarial elabora pinturas libres de plomo y mercurio, y su proceso de manufactura tiene cero descargas a los cuerpos y mantos acuíferos.