El presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, “está muy bien” de salud, luego de sufrir este lunes una “descompensación” en Veracruz, México, dijo ayer a los periodistas el Secretario de Gobernabilidad y Comunicaciones, Hato Hasbún.
El mandatario salvadoreño suspendió este lunes su participación en la XXIV Cumbre Iberoamericana, tras sufrir en Veracruz, donde se llevó a cabo el encuentro, una “leve descompensación”, según informó el lunes a través de un boletín Casa Presidencial y la Cancillería salvadoreña.
Son “cosas que los médicos consideran en los momentos oportunos, así que el presidente está muy bien” de salud, indicó ayer Hasbún sin precisiones sobre qué afectó la salud de Sánchez Cerén.
Fuera de las declaraciones de Hasbún, no hubo algún comunicado oficial ayer informando sobre cómo seguía el estado de salud del mandatario.
Los comunicados oficiales que difundió Casa Presidencial se limitaron a informar sobre los acuerdos de la cumbre en Veracruz, pero ninguno consignaba lo que Hasbún dijo brevemente a medios de comunicación.
Murillo: “está estable”
Mientras tanto, en Nicaragua la primera dama y coordinadora del Concejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, informó que Sánchez Cerén ya estaba en mejor condición de salud.
La funcionaria señaló en su país que el mandatario salvadoreño “está estable, recuperándose”.
“Estuvimos conversando con él y deseándole un pronto restablecimiento”, destacó Murillo.
Asimismo, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, le deseó un “pronto restablecimiento” a su homólogo salvadoreño.
Debido a su problema de salud, el canciller salvadoreño, Hugo Martínez, se encargó de desarrollar la agenda del mandatario salvadoreño en la Cumbre, que concluyó ayer en Veracruz.—AGENCIAS.