Paul Vargas, de 20 años, creó su primera banda a los 19, pero de ella quedó solo un trazo luminoso, como el que dejan las estrellas fugaces. No se desanimó y a los pocos meses fundó “Polifacetik”.
Rock alternativo y experimental e influencias de blues y jazz caracterizan el sonido de Paul y sus compañeros músicos: Mondragón, en la voz, el batero Javier Portillo, Omar Olla en los teclados y el bajista, Carlos Hernández.
“Decidí crear un proyecto solista pero tenía temor de cómo iba a ser aceptado. Ser solista es mucho más complicado que una banda, porque sentirse identificado con una sola persona es más difícil para el público”, comentó Vargas sobre el porqué de una “banda”, que en realidad es “Paul y su grupo”.
Sus compañeros se sintieron identificados con el proyecto musical, por ello, sin dudar, decidieron acompañar en esta travesía a Vargas.
Mondragón, vocalista de Polifacetik, expresó que el concepto de Paul fue interesante y “pudimos coincidir con las ideas, conceptualización y la música. Vamos adelante y apoyando a Paul en lo que podamos. Son sus ideas y nosotros las materializamos”.
Canciones y conceptos nacen de Paul. Sus experiencias negativas y positivas son las que están plasmadas en temas como “A veces”, “La espera”, “Lejos con una mujer”, “Ella”, “Escamas de reptil”, “Coffe rock”, entre otras. Pero la apertura y flexibilidad para realizar arreglos, también está presente al interior de esta agrupación “polifacética”.
Sentado en un pequeño banco dentro de su estudio de ensayos, Paul afirmó que los temas -que algunos hablan de concientización social, de amistad y “sobre gente buena y mala”-, ya han sido presentados en diversos escenarios de El Salvador. Santa Ana, es uno de los públicos más efervescentes, de acuerdo al compositor.
Resonancia es el significado que precisa el contexto en el que se mueven las bandas pertenecientes al movimiento “indie”. Ese mismo en el que se desenvuelve Polifacetik.
El líder del grupo musical indicó que entre esta cultura emergente se siente bien apreciado, y que existe un importante “renacimiento de la música salvadoreña. Si la gente piensa que no hay música salvadoreña está completamente equivocada”.
Aunque las radios locales no transmitan los múltiples géneros de Paul y sus músicos (y de otras bandas indie), Polifacetik afirmó que las presentaciones en vivo han sido su medio para divulgar su sonido, así como las plataformas streaming como Spotify, Dezeer y Amazon.
“La industria ha cambiado. Ahora todo es digital. 90 por ciento de la música es pirateada. La música ha evolucionado a conciertos en vivo. En cinco meses de trabajo tenemos 20 fechas tocando, y si te soy honesto no todos han pagado. Hemos hecho un sacrificio para sentar el nombre, lo he visto como una inversión a mi carrera y para mi futuro”, aseveró Paul.
A pesar de las carencias de la industria musical del país, Polifacetik tiene calendario lleno para sus presentaciones así como material para continuar grabando. “Me siento entusiasmado. Mi meta es expandirnos, y que por lo menos una persona entienda mi mensaje. Que lo tome como quiera, pero que influya de una manera positiva. Eso me hace feliz”, concluyó Vargas.