Patricia Murillo “Yo estaba mentalizada a no dejarme opacar por las demás”

Nuestra Belleza Universo El Salvador 2014 hace un recuento de lo que vivió en Doral, Miami, sede del pasado Miss Universo

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por Osmín Monge escena@eldiariodehoy.com

2015-02-12 12:00:00

Relajada y sin las poses forzadas que se le exigen a toda reina de belleza, Patricia Murillo, Nuestra Belleza El Salvador 2014, nos habla sobre su participación en el pasado Miss Universo, en Miami, a finales de enero de este año.

Aunque no logró su tan ansiada clasificación, esta joven de 22 años, originaria de Juayúa, Sonsonate, se siente satisfecha por su desempeño.

Luciendo impecable y haciendo gala de su amplia sonrisa, sus suaves gestos y su tono dulce, la beldad salvadoreña accede a contestar cada una de las preguntas y a recordar lo que ella llama “la experiencia de su vida”.

En su momento, hubo críticas por tu triunfo en El Salvador ¿Cómo enfrentaste esta situación?

—Fue muy difícil, porque había gente que no quería que yo ganara Nuestra Belleza Universo El Salvador. En las redes sociales hubo gente que me apoyó, pero era más la gente que hacía comentarios negativos y feos contra mí. Quiérase o no, me hacían sentir mal. Luego decidí no leer ningún comentario, solo miraba las fotos que subían. Me “resbalaba” lo que la gente negativa me decía.

¿Cómo te preparaste para Miss Universo?

—Fueron ocho meses de preparación: maquillaje, peinado, oratoria, vestuario… También miraba videos de concursos anteriores para saber cómo se desenvolvían las misses; asimilé lo bueno y lo puse en práctica. Tony Melara fue una de las personas que más me apoyó. La gente, al ver mi evolución, me fue aceptando.

Antes de irme para Miami dormí solo dos horas. Armé mis maletas con la ayuda de algunos amigos cercanos y de familiares. Llevé la ropa que me prestaron los patrocinadores, pero la mayoría del vestuario, los accesorios y el maquillaje eran míos. Llevaba anotado en una libreta lo que iba a usar cada día.

¿Te hiciste alguna cirugía estética?

—Para qué voy a mentir, sí me operé la nariz.

¿Cómo era el ambiente en Miss Universo?

—Era tenso. Yo estaba mentalizada a no dejarme opacar por las demás candidatas. No se puede bajar la guardia ni la moral. Me esforcé un montón para demostrarle a la gente que no creyó en mí que yo sí podía hacer un buen papel.

¿Qué fue lo que más te gustó del concurso?

—Me gustó todo. Disfruté cada momento; no me importaba que los tacones me hicieran cayos. Disfruté la visita a los restaurantes, el contacto con la gente… cada experiencia fue maravillosa.

¿A qué horas te levantabas para atender tus compromisos?

—A las siete de la mañana. No me tocaba levantarme tan temprano para peinarme, ya que los peinados que usé eran prácticos. Algunas candidatas se levantaban a las cinco de la mañana, para ponerse sus rulos. Yo comía bien y sano. No pasaba hambre. Había niñas que comían solo piña o lechuga.

¿Cómo fue tu actitud en el certamen?

—Siempre fui muy amable con las chaperonas, los maquillistas, las candidatas y la gente que se me acercaba. Cada miss hace su propio terreno. Por ejemplo, yo no dejaba que me maquillara otra persona que no fuera el estilista que yo había escogido.

Había algunas candidatas con actitud de “elevadas”. Lo miraban a uno de pies a cabeza, como queriendo decir: “aquí estás pero yo no te hablo”. Siempre estuve en medio de las misses más buscadas, como Costa Rica, Venezuela, República Dominicana y México.

¿De todas las latinas, quién era la más apartada?

—Colombia. Todas las latinas nos llevábamos bien, bromeábamos, comíamos juntas, pero ella no. Quizá sentía más afinidad con las europeas.

¿Qué sentiste cuando no te llamaron entre las semifinalistas?

—Yo estaba mentalizada que sí podía entrar; me creía supercapaz. En ese momento se me revolvió el estómago. Me dio tristeza, pero también estaba contenta. No me enojé, no hubo lágrimas ni frustración.

Todas las favoritas que nos llamaron quedamos en shock. Nos abrazamos y nos dimos palabras de aliento. Ninguna lloró.

¿Qué opinas del resultado final de Miss Universo?

—Cuando quedaron las cinco finalistas, el resto nos imaginamos que ganaría Jamaica o Estados Unidos. Cuando nombran a Jamaica como cuarta finalista nos preguntamos ¿qué pasó aquí? Todas estábamos admiradas. Al quedar únicamente Colombia y Estados Unidos, algunas niñas gritaban “Nia, Nia” (el nombre de la estadounidense). Cuando nombraron a la colombiana, dijimos: ‘Bueno, ¿qué le vamos a hacer?’. La mayoría de muchachas nos fuimos a abrazar a Jamaica.

¿Felicitaste a la colombiana?

—No, sinceramente no lo hice. No porque me sintiera molesta, sino porque no tuve la oportunidad de hacerlo.