Una tarde muy especial hubo ayer en Madrid, alegría a raudales de miles de peregrinos que caminaban en pequeños grupos de personas (por lo general entre 10 y 15) a la víspera de la beatificación de Monseñor Álvaro del Portillo, sucesor de San Josemaría Escrivá al frente de la prelatura del Opus Dei.
“Saxum” llamaba San Josemaría a “Don Álvaro”, que significa “Roca”. Y es que el nuevo beato fue el complemento del Fundador apoyándole y, tras su muerte sucediéndole en la conducción de “La Obra”, que se ha extendido a más de 80 países, por todas las regiones del mundo.
Precisamente esa universalidad –personas de todas las razas, de todos los estratos económicos– es lo que se ve en el casco urbano y en lugares precisos de peregrinación en esta cosmopolita ciudad.
Para atender espiritualmente a decenas de miles de peregrinos se han distribuido parroquias por regiones en el mundo, para quienes requieran ser atendidos en su idioma natal.
Por ejemplo, anoche a las 8:00 p.m., en la Iglesia Parroquial de San José (inicio de la Gran Vía), la misa fue en alemán. Es enorme la cantidad de jóvenes que han llegado y el Colegio Retamar, a 14 kilómetros de Madrid, fue designado como lugar de alojamiento para los centroamericanos.
Se esperaba a 400 pero ayer eran 600, pues ahí llegaron también jóvenes polacos, croatas, filipinos y de El Congo. Duermen literalmente en el suelo y en el Colegio proporcionan el desayuno, luego salen en buses. Han ido a Toledo, El Escorial, Parque El Retiro, y saben las horas en que es gratis el Museo El Prado.
Desde el Parque El Retiro, pulmón de Madrid, pasando por Puerta de Alcalá, la Gran Vía, Puerta del Sol, Plaza Mayor hasta la Catedral, el ambiente era de fiesta ayer por la tarde. La Virgen de la Almudena es la patrona de Madrid, y de la visita que le realizó San Juan Pablo II a la bellísima Catedral ha quedado la “Oración de San Juan Pablo II a Santa María la Real de la Almudena”. Pero no solo en esta zona tan conocida han habido actividades relacionadas, sino en diferentes puntos de esta atractiva ciudad.
Por ejemplo, en Plaza Colón ha estado una exposición sobre Monseñor Álvaro del Portillo titulada “Un Santo en datos”. La Sala de prensa queda paralela a Calle Serrano a la par de la casa de Florentino Pérez.
Duermen los miles de peregrinos al cierre de esta nota, pues desde temprano por la mañana (en unas horas, horario de España) se planeaba una descomunal movilización hacia Valdebebas, al acto de beatificación de “Don Álvaro”.
Muchos favores y bendiciones se están recibiendo en estos días, en los que Monseñor Del Portillo llega a los altares. Tiempo de fe, oración y de profunda reflexión. Al observar las iniciativas contra la pobreza que impulsó el nuevo beato, como Harambee, que de las cuatro iniciativas que contiene, tres están siendo desarrolladas en África, llega a la mente no el Madrid moderno, cosmopolita de estos días, pero de los duros momentos que pasó España durante el siglo pasado.