Iniciando un nuevo capítulo en su carrera artística, Andy Gálvez está promoviendo su nueva propuesta musical “Culpable o no”, una sinergia de vivencias personales basadas en el poder del amor, una ruptura de lo cotidiano que evoca fuertes emociones.
“Culpable o no”, es el segundo de sus sencillos que ya se escucha en varios países del continente americano como Bolivia, Perú, Colombia, Estados Unidos, Guatemala y Honduras. Y hoy, el intérprete está interesado en ganarse al público cuscatleco.
“Estoy de gira en El Salvador porque quiero compartir con mis hermanos salvadoreños. Es la primera vez que visito el país y quiero transmitir ese cúmulo de energía que uno tiene si existe la culpabilidad o no, para tener esa decisión enorme uno debe romper esquemas para caminar seguro hacia un lado. Es increíble el poder del amor”, comentó Andy Gálvez para El Diario de Hoy.
La canción fue producida por Carlos Guillén, con quien ha logrado presentar dos tipos de versiones musicales. Una en norteño banda y la segunda en merengue, para animar más las fiestas.
El guatemalteco ha sabido ganarse el corazón de sus fans, pues el artista compartió el escenario con cantantes de calibre como Gloria Trevi, Fanny Lu, La dinastía Rivera (Pedro, Juan, Lupillo y Gustavo), Daddy Yankee, Juan Luis Guerra, Tito el Bambino, Pitbull, Chino y Nacho, entre otros.
Su primer sencillo como solista, incursionó en el género regional mexicano, presentando “Los Puercos”, una canción al estilo Banda Sinaloense. “Este gran éxito se lanzó por redes sociales 91.273 reproducciones en el canal de Youtube. Y el cariño de la gente es enorme”, aseguró el artista.
Andy Gálvez está por grabar su vídeo oficial para “Culpable o no”, mientras el próximo 19 de junio estará en Honduras en concierto.
“Muchas gracias a la gente que, de alguna u otra manera, ha formado parte de mi formación desde Alerta 3, sigo mis sueños de infancia y les revelo que estaré en los premios Juventud”, añadió.
Su mánager, Nory Gálvez, especificó que en octubre el artista volverá a su tierra natal para hacer vibrar el corazón del mundo maya en un concierto inolvidable.