LAS VEGAS. Si bien las tonalidades cítricas y pasteles recorrieron la alfombra roja de la gala de premiación de los Billboard Music Awards 2014, el negro se coronó como el rey de la noche.
Desde Nicki Minaj hasta Kendall Jenner se dejaron conquistar por esa ausencia de luz que tiene a la industria de la moda a sus pies desde tiempos inmemoriales.
Kesha sorprendió a los paparazzi con un atuendo poco común en ella. Su vestido color gris-negro de corte sirena fue muy admirado, como su curvilínea figura. Luego de ausentarse para atender su problema de anorexia, la cantante regresó con mucho éxito, hasta coqueteó con uno de los fotógrafos agarrándose los senos. ¡Dejaría de ser ella!
Shakira, también marcó huella con su propuesta en tonos azules y un elegantísimo Gerard Piqué a su lado. No hay duda de que están muy enamorados.
Nuevamente, Jennifer López pasó con honores todas las pruebas. Lucía bellísima, como siempre, aunque llamó la atención su peinado, el mismo que utilizó en la entrega de los Grammy en el año 2000, cuando escandalizó con su famoso Versace verde.
Ricky Martin, por su parte, aprovechó su paso por la alfombra roja para hacer un llamado por la crisis en Nigeria.
Al igual que lo hizo la actriz mexicana Salma Hayek el sábado en Cannes, Martin llegó a la ceremonia con un cartel con el mensaje “Bring Back Our Girls” (Regresen a nuestras chicas).
El eslogan ha sido utilizado en redes sociales y por personas influyentes como Michelle Obama, la primera dama de Estados Unidos, para exigir la liberación de más de 300 colegialas secuestradas por el grupo extremista islámico Boko Haram.
Las hermanas Jenner, también robaron miradas, al igual que el rapero Wiz Khalifa y Amber Rose, quien se dejó ver con unas gafas fuera de lo común.
El blanco fue otro de los protagonistas de la alfombra, al igual que el seductor rojo.
Los chicos, por su parte, optaron por ser ellos mismos y exhibir su personalidad.