Cómo sobrevivir en el Amazonas por Tyler Blu

Directo desde el amazonas, Blu hace un recorrido y ofrece algunos consejos para los turistas, gracias a la Twentieth Century Fox

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elsalvador.com

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2014-04-09 8:00:00

Hola a todos. ¡Soy Blu! Reportando desde lo más profundo del corazón de la selva amazónica. Me está yendo muy bien aquí… estoy disfrutando cada segundo… al menos es lo que no dejo de repetirme.

El Amazonas es una gran selva tropical, en lo que respecta a las selvas tropicales. Proporciona el 20 por ciento del oxígeno del planeta, por lo que frecuentemente se le llama los pulmones del mundo. Así que podría decirse que estoy en el corazón de los pulmones del mundo. ¡Ja!

¿A quién estoy engañando? Es terrorífico. En serio. Hay peces carnívoros y serpientes gigantes y arañas monstruosas y no quiero pensar en qué más habrá. Ah, jaguares.

Cielos, desearía no haber pensado en eso… No hay problema. ¿Qué querría un jaguar conmigo? No soy una comida lo suficientemente llenadora. ¿O sí? No, no puede ser posible. [¡Deja de pensar en eso! De acuerdo – reinicio…] Hola a todos. ¡Soy Blu! Si alguien está planeando un viaje por el Amazonas en un futuro cercano, tengo algunas palabras de advertencia, digo, consejos para ustedes.

1- Viaje en grupos grandes

No se adentren solos en la selva amazónica. Estoy con mis viejos amigos Nico y Pedro y Rafael. Si pasa algo, los tengo de apoyo –en caso de que no sean los primeros en volar de regreso a Río–. Perla está aquí, desde luego. No iría a ninguna parte sin Perla. Y los chicos. Me siento mucho más seguro viajando con este grupo. Si ocurriera algo malo, espero que al menos uno de nosotros pudiera ir a llamar a las autoridades – mientras haya buena recepción de celular y nada salga mal con los satélites que llevan la señal-. Supongo que si estuviera nublado eso podría interferir con la recepción. ¿Pero qué tan seguido se nubla el Amazonas? Supongo que algo, ya que aquí llueve más que en la mayor parte del planeta. No hay problema. Estaremos bien. Y de cualquier modo, ¿por qué preocuparse por la recepción de los celulares cuando hay tantas otras cosas que me pueden hacer perder el sueño?

2- Viaje con el equipo necesario

Si están viajando al Amazonas, asegúrense de planear con anticipación y llevar el equipo necesario. No durarían mucho con solamente las plumas que traen en la espalda –suponiendo que tengan plumas, desde luego–. Yo traje lo básico: linterna, papel de baño, filtro de agua, juegos de mesa, cepillo de dientes eléctrico, mapa, GPS, repelente de insectos, una cuchara/tenedor y una garra llena de otros objetos esenciales. Podrían estarse preguntando cómo le hice para traer tantas cosas conmigo. La respuesta es sencilla: mi confiable cartera-cinturón.

3- No hable con extraños

Nunca sabes si alguien es amigable o está buscando su próxima comida, así que aquí en la selva es mejor no hablar con extraños. Bueno, ésa es una buena idea en general, pero especialmente en el Amazonas. A los chicos les emociona hacer nuevos amigos. Bia y Tiago están emocionados -Carla no sé. Me la paso diciéndoles que tengan cuidado.

Hasta ahora no ha habido señales de otros guacamayos azules pero hemos visto unos cuantos guacamayos rojos en la distancia. A mí me pareció que son problemas. Los vimos cerca de un campo de nueces en Brasil. Estaban volando con poco cuidado, tragando nueces brasileñas sin que les importara nada más. No parece que les guste ayudar. Si nos perdemos, dudo que nos den direcciones de cómo llegar. Ya ni digamos si les pregunto en dónde están los otros guacamayos azules. Espero no tener encontronazos con ellos mientras estemos aquí. El líder del grupo se ve particularmente rudo. Creo que escuché que los otros le dicen Felipe. Que tengas un bonito día, Felipe. Me mantendré lejos de ti lo más que pueda. Soy tan solo un turista como cualquiera, explorando el corazón del Amazonas.

4- Pon atención a tus movimientos

Como podrán imaginar, hay muchos árboles por aquí. Eso dificulta el darte cuenta de dónde has estado y a dónde vas. Admito que he volado en círculos en varias ocasiones ya. Por eso es una buena idea mantener un récord de tus movimientos. Los tradicionales pluma, papel y mapa podrían ser útiles pero tomen en cuenta que llueve mucho aquí. Podría correrse lo que escribieron, sin mencionar lo que le va a pasar a su mapa. Siempre son útiles las migajas de pan. Podrían irlas tirando mientras van caminando por la selva, pero es muy probable que las migajas sean inmediatamente comidas por capibaras u ocelotes u hormigas rojas. Nota: las hormigas rojas definitivamente no son amigables. No sé cómo le hacen los osos hormigueros gigantes. Obviamente les gusta la comida picante. Yo me quedo con mis panqueques, gracias.

Lo mejor son los electrónicos. Yo he confiado en mi querido GPS bastante por acá. Aún antes de llegar, el GPS fue fundamental para nuestro arribo. Y espero que nos saque de aquí pronto.

5- Que no cunda el pánico

Guardé la regla más importante para el final…

Que no cunda el pánico… es decir, no sean presas del pánico. Si algo sale mal conserven la calma. Respiren profundo y recuerden que sin importar lo mal que se pongan las cosas – siempre se podrían poner peor. Lo que quiero decir es que pueden hacerlas peor si se dejan llevar por el pánico. Seré el primero en admitir que no soy el pájaro más calmado que ha volado a través de dos continentes (en avión). Así que me lo recuerdo a mí tanto como se los recuerdo a ustedes. Debo recordar que aún si mis peores temores se vuelven realidad en este viaje, todo saldrá bien. Tarde o temprano estaré de regreso en mi cómoda camita en mi cómodo nido de regreso en la cómoda Río. Extraño Río. Extraño la cultura, el bullicio, el sonido de… el tráfico. Supongo que soy un ave de ciudad de corazón.

Sí, el nuevo filme protagonizado por los guacamayos azules se desarrolla en la selva del Amazonas. Blue y Perla vuelven a sus raíces junto a sus tres hijos Carla, Tia y Tiago y encuentran a la familia de Perla. Lamentablemente, la cacatúa Nigel va tras ellos, con sed de venganza.