Pequeños gigantes de la gran pantalla

Tanto en el cine como en la televisión se han plasmado personajes peculiares. Son tan únicos que han quedado en la memoria de los cinéfilos y el público

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elsalvador.com

Por Elis Silva @atilita

2014-03-17 8:00:00

Las puertas del mundo del espectáculo están abiertas para cualquier persona sin importar su color, peso, nacionalidad o tamaño. Y muchos artistas toman estas características como una gran virtud.

Personajes con gran talento para la actuación apenas sobrepasan el metro de altura, pero eso no ha sido impedimento para que millones disfruten su trabajo en el cine y la televisión.

Distintas enfermedades congénitas fueron encontradas en estas estrellas que trabajaron arduamente como cualquier persona y ahora son reconocidas por su labor en el mundo de los audiovisuales.

Uno de los rostros más conocidos en las películas de los años 50 era el de Angelo Rossitto. “Freaks” (1932) o “Child bride” (1938) fueron escenarios perfectos para la aparición del actor de 89 cm. Además, fue el villano en “Mad Max” (1985).

Otro diminuto histrión que escogió el lado del mal en el cine fue Nelson de la Rosa, dominicano que además de haber protagonizado su propio filme en Italia, “Ratman” (1980), participó en “La isla del doctor Moreau”, junto a Marlon Brando y Val Kilmer.

Dos estrellas de color provocaron risas con su gracia y humor, sus nombres son Gary Coleman y Emmanuel Lewis. El primero es recordado por su frase “¿De que estás hablando, Willis?”, mientras el segundo por su gran amistad con el rey del pop Michael Jackson.

En las películas de fantasía no es extraño quedar perplejo ante la actuación de legendarios artistas que poseen ya una amplia trayectoria en Hollywood, como es el caso de Warwick Davis.

Este británico ha obtenido papeles en cintas como “El retorno del Jedi” (1983), “La aventura de los Ewoks” (1984) y “Willow” (1988), sin olvidar su participación en las sagas de “Leprechaun” y “Harry Potter”.

También hay pequeños gigantes detrás de grandes disfraces. El popular “R2-D2” de “Star Wars” recibió vida gracias al actor Kenny Baker, quien por casi tres décadas introdujo su cuerpo en el robot que le dio la fama.

En las comedias también se puede disfrutar con la figura de Tony Cox. Su nombre no es familiar, pero los fans de “Spaceballs” (1987), “Me, myself & Irene” (2000), “Bad santa” (2003), “Epic movie” (2007) y “Disaster movie” (2008) sí lo recordarán. Hasta tuvo una intervención en el video de Foo Fighters “Breakout”.

Las chicas no se quedan atrás. La actriz australiana Kiruna Stamell ha tenido apariciones en “Moulin rouge!” (2001) y “The best offer” (2013), y además es una reconocida bailarina.

En los 80 hubo una serie llamada “El hechicero” que fue protagonizada por David Rappaport. A pesar de que el protagonista de este programa y otros de lo mencionados ya fallecieron, muchos prefieren recordarlos por sus inolvidables roles.