Los DJ salvadoreños Escobar y Faceless 22 fueron los encargados de calentar motores y poner buena vibra entre los asistentes al último concierto electrónico del año de Istmo Night, el cual se realizó el pasado domingo en el anfiteatro del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (Cifco).
Entre gritos y bailes, la audiencia se puso en sintonía con los beats que provenían del escenario. Una de las sorpresas de la noche fue protagonizada por el DJ Borgore, quien fue recibido con gritos y mensajes de bienvenida.
Gabriela Sánchez, una de los asistentes al show, expresó su alegría al poder ver a Borgore. “No hay nada como Borgore para bailar y entrar en onda. Es algo totalmente diferente a lo que los demás músicos te pueden hacer sentir”, expresó mientras el músico pinchaba uno de sus hits.
El momento máximo durante la intervención de Borgore fue cuando el DJ tomó una bandera de El Salvador. Las luces de las cámaras y teléfonos no se hicieron esperar. La audiencia guardó el momento en múltiples instantáneas.
El momento cumbre de la noche ocurrió pasadas las doce. Steve Aoki saludó a sus fanáticos mientras se apoderaba de la consola. El DJ estadounidense-japonés gritó su amor por la música y preguntó a la audiencia: ¿Están listos para festejar?
José Agreda, quien no dejo de celebrar la participación de Aoki, explicó que le gusta la música de intérprete porque “ningún otro DJ tiene esa carga anímica que se siente en cada una de sus canciones. Es bien difícil encontrar otros que toquen como él”. Opinión que fue compartida por otro fan, Fernando Magaña, quien deseó que la venida de Aoki sirva de apertura para que otros DJ se aventuren a venir a El Salvador. “Yo creo que la audiencia de El Salvador es una de las más bondadosas…”, agregó.