Zac Efron: “Sé que tengo que arriesgarme, intentando nuevos trabajos”

Después del arrollador éxito de High School Musical, el actor ha buscado nuevos retos que lo hagan crecer artísticamente. Ahora prueba suerte como médico en la película "Parkland"

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Por Fabián Waintal Corresponsal en Hollywood escena@elsalvador.com

2013-10-22 7:00:00

Dos de la tarde en Toronto y una alfombra roja desplegada en el Hotel Intercontinental, en pleno centro del Festival Internacional de Cine. Ahí mismo, donde el año pasado estuvieron Viggo Mortensen o Jake Gyllenhaal entrevistamos a Zac Efron. Con los infaltables lentes de sol, para pasar inadvertido por la ciudad, tampoco es el mismo adolescente que se había hecho tan famoso con las películas de de “High School Musical”, trabajando con un tema tan maduro como el asesinato de John F. Kennedy, donde él es justamente uno de los protagonistas de la película “Parkland”.

—¿Cómo se siente crecer bajo la lupa de los fans y el público que viene siguiendo cada paso de tu vida, desde el éxito de “High School Musical”?

—Es interesante. Es difícil describirlo, porque no conozco otro estilo de vida. Supongo que solo puedo concentrarme en mi camino. Mi meta siempre fue encontrar nuevos desafíos, aprendiendo y creciendo como artista. Tuve mucha suerte de poder trabajar con buenos actores y grandes directores. Supongo que vengo haciendo lo que siempre me planteé hacer. Sé que tengo que arriesgarme, intentando nuevos trabajos. No me gustaría para nada quedarme en el camino fácil.

—¿Qué pasó con tu carrera musical?

—Mi carrera musical está en lista de espera (risas), para hacer películas como “Parkland”. Y creo que mi nombre es maravillosamente incongruente en el póster. Pero hace tiempo que decidí trabajar con gente que admiro, buscando nuevos desafíos. Y para mí fue como cumplir un sueño trabajar con los mejores actores, contando un momento histórico tan poderoso como el asesinato de Kennedy. Disfruto mucho más esta etapa de mi carrera, pero siempre siento que recién estoy empezando.

—¿Es cierto que Simon Cowell, de “American Idol”, te había ofrecido un contrato para grabar tu propio CD y lo rechazaste para seguir con la actuación?

– Sí. Bueno, algo así. Un día hablamos del tema, pero no sé si es completamente cierto que lo rechacé por seguir con la actuación. Supongo que la gente se olvida que hace bastante tiempo que no filmo una película musical y hace años que estoy haciendo otro estilo de actuación. Pero sí, esto es lo que quiero seguir haciendo.

Zac Efron ya había cruzado las puertas de Disney con una participación en la comedia “The Suite Life of Zack & Cody”, cuando se convirtió en la estrella adolescente más popular del momento, con la película “High School Musical”. En un canal de televisión normal hubiera caído pésimo que la misma película se pasara una y otra vez. Pero Disney Channel fue atrapando cada vez más admiradores, con cada nueva repetición, donde los fans terminaron conociendo la película de memoria sobre el romance estudiantil que Zac también vivió en la realidad, con Vanessa Hudgens. En aquel entonces también surgió cierta polémica cuando se supo que la voz de Drew Seeley en realidad había sido mezclada con la de él (y fue Drew el que se fue de gira con el resto de los protagonistas de High School Musical, cuando Zac decidió quedarse en Hollywood filmando el musical “Hairspray”). Para cuando salió la segunda película, High School Musical había hecho historia, convirtiéndose en el programa más visto de la televisión de cable, con 17.2 millones de espectadores (solamente en Estados Unidos). Con un éxito que superó todas las expectativas pasó directamente al cine con la tercera película de “High School Musical: Senior Year” que también influenció en el lanzamiento de otro éxito como “Glee”. Pero para esa época, Zac ya se había despegado de los musicales, presentando en el Festival Internacional de Toronto la película “Me and Orson Wells”. Hasta se dio el lujo de rechazar el musical de “Footloose”, para elegir el camino de las historias románticas con la particularidad de enamorarse en el cine de mujeres mucho más grandes como Michelle Pfeiffer (“New Year’s Eve”) o Nicole Kidman (“The Paperboy”). Pero mientras Miley Cyrus se descarrila con su salida de Disney, él supo encontrar la puerta para crecer. Y “Parkland” es un buen ejemplo.

—¿Qué opinas de otras estrellas de Disney como Miley Cyrus y el camino completamente diferente que está tomando?

—La verdad, no sé bien lo que buscan otras estrellas de Disney. Yo solo puedo hacer lo que me gusta, lo que me dicta el corazón. Por eso acepté el rodaje de una película como “Parkland”.

Basado en el libro “Cuatro días en noviembre”, la película “Parkland” sigue de cerca lo que pasó inmediatamente después del asesinato de John F. Kennedy, en Dallas, Texas, el 22 de noviembre de 1963. Mostrando la reacción del hermano y la madre del supuesto asesino Lee Oswald, además del detallado protagonismo del que registró el famoso asesinato en una cámara Súper 8. La película cuenta los últimos minutos de vida de JFK en una sala de operaciones, donde Zac Efron interpreta al médico que hizo lo imposible por salvarlo.

—¿El hecho de interpretar un médico tan joven, con toda la presión de tener que salvar al Presidente, genera también cierta presión en la realidad?

—La responsabilidad de este médico tan joven es fascinante, porque de repente se encontró en frente del hombre más importante del mundo, con heridas mortales. Fue divertido interpretar todos esos momentos. Resultó algo muy emocionante y a veces terrorífico, porque lo mostramos tal cual como pasó en la vida real.

—¿Los amigos que tienen tu edad saben el impacto histórico que tuvo el asesinato de John F Kennedy?

—En ese sentido fue bastante interesante filmar esta película, porque para mí fue muy educativo. Fue un día rodeado por mucho misterio, con demasiada confusión y muchísimas controversias. Y es la clase de verdad que también explora la película. La verdad, yo no sabía todo lo que había pasado y el rodaje fue un punto de vista muy específico. Yo lo tomé como algo tan importante como el ataque terrorista a las Torres Gemelas de Nueva York, porque me acuerdo específicamente todo lo que pasó ese día. Y con la historia de Kennedy no sabía tanto, fue una forma maravillosa de aprender. Me abrió los ojos por completo.

—¿Es verdad que filmaron la película, al estilo de un documental, sin parar de filmar?

—Sí, yo nunca había trabajado antes así. Recreamos el momento con la mayor honestidad posible, mostrando lo que pudo haber pasado. El director, Peter Landesman, parecía una mosca en la pared. Nosotros no nos dábamos cuenta dónde estaba la cámara ni lo que estaba filmando. La única opción que tenía era concentrarme y actuar. Fue fascinante. Hubo momentos muy intensos, donde tuve que operar, porque me habían puesto una persona de verdad. Debo haberle roto las costillas. Fue muy intenso. Después de cada toma, yo no podía parar de temblar. El efecto del rodaje me duró varios días.

Curiosamente detrás de la producción de la película “Parkland” se encuentran dos actores famosos que ni siquiera aparecen en el cine: Tom Hanks y Bill Paxton. La idea había surgido en una conversación durante el más común partido de béisbol, discutiendo dónde habían estado el día que asesinaron a JFK, recordando que Paxton había visto al mismísimo Kennedy, en un discurso de ese mismo día, antes de que lo mataran. Y la idea siguió cobrando vida, cuando en un museo que mostraba la filmación de aquel discurso, Bill Paxton se reconoció sobre los hombros de su padre y al volver al aeropuerto se cruzó con el libro “Cuatro días de noviembre”, con el que realmente basaron la película “Parkland”.

—Tom Hanks era el productor de la película, aunque nunca aparece en la pantalla. ¿Lo conocías antes?

—Sí, justamente había leído una obra de teatro con él, un par de años atrás. Nos conocimos mucho antes que “Parkland”.

—¿Cómo reacciona un famoso al momento de conocer alguien todavía más famoso? ¿No te pone nervioso para nada?

—Sí, claro.

—¿Con quién te pasó?

—Ah… mucha gente. ¿Tom Hanks? (Risas).

—¿Y cómo fue el estreno mundial de “Parkland” en el Festival Internacional de Cine en Toronto?

—Para mí es uno de los mejores públicos y las alfombras rojas son épicas. Es muy distinto. Es algo memorable, siempre me emociono cada vez que voy a ese Festival. Y cada año que voy siento una relación más personal con el lugar. Me alegra que lo hayan elegido para el estreno mundial.

—¿Los fans no molestan?

—Todo lo contrario, son geniales.

—¿Pero en viajes así como Toronto te queda tiempo para ser un turista como cualquier persona normal?

—Yo había trabajado antes en Canadá, hice varias películas ahí. Ir a Toronto es como volver a casa, pero tampoco salgo del hotel. Me acuerdo muy bien el paisaje de la ciudad que se ve desde la habitación porque apenas pude disfrutar la parte de adentro del edificio (risas).

—¿Qué sigue después de “Parkland”?

—Tengo una película que se llama “That Awkward Moment” que está por salir muy pronto y después otra, “Neighbors”, con Seth Rogen. No veo la hora de verla.

—¿Son dos comedias?

—Sí.

—¿Ninguna comedia musical entonces?

—(Risas) No, nada todavía.