Estudio afirma que dormir mal afecta el rendimiento

Además de influir en el desempeño escolar, dormir mal también favorece la obesidad y la somnolencia diurna.

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elsalvador.com

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2013-08-20 7:00:00

Los niños que duermen mal tenderían a rendir peor en la escuela que los que tienen un descanso reparador. Un equipo de Brasil estudió a un grupo de alumnos de entre siete y 10 años de las escuelas públicas de San Pablo.

Los niños con síntomas de trastornos del sueño o apneas obtenían calificaciones más bajas que los que dormían bien.

El 13% de los niños con problemas para dormir había reprobado en portugués, comparado con el 9% de los que no tenían esas dificultades. El 25% de los niños con interrupciones del sueño no habían aprobado matemática, a diferencia del 8% de los niños sin problemas para dormir.

“Dado que (los síntomas de los trastornos del sueño) y, en especial, (los trastornos respiratorios) son muy prevalentes, sugerimos que los médicos y los docentes deberían conocer estos efectos alarmantes y tomar las medidas adecuadas para solucionar o mitigar lo que es un problema de salud pública”, dijo el equipo de Luciane Bizari Coin de Carvalho, de la Universidad Federal de San Pablo.

Se estima que un cuarto de los niños de Estados Unidos sufren de interrupciones del sueño en algún momento. Influiría la falta de una rutina para ir a la cama y la ansiedad, en la escuela o el hogar.

Otros niños tendrían trastornos del sueño sin detectar, como el sonambulismo, las pesadillas o el insomnio, o los trastornos respiratorios, como la apnea del sueño.

Algunos fármacos, como los del asma o el TDAH, alteran el sueño y lo mismo ocurre con algunas enfermedades. Dormir mal también favorece la obesidad y la somnolencia diurna.

Los datos

Entre 1999 y el 2001, el equipo distribuyó en escuelas públicas de San Pablo unos 5.400 cuestionarios sobre los síntomas de los trastornos del sueño y respiratorios. Luego, revisó las calificaciones de portugués y matemática de los 2.384 alumnos cuyos padres habían respondido el cuestionario.

El 31% de los niños tenían síntomas de trastornos del sueño: dificultad para dormir o mantenerse despierto o sentir sueño todo el tiempo. Un 27% tenían trastornos respiratorios del sueño. Las calificaciones de esos alumnos era significativamente más baja que la de los niños sin esos síntomas.

En Brasil, las calificaciones son numéricas (de cero a 10) y con cinco puntos se aprueba una materia. La nota promedio de portugués era 6,6 en los niños con problemas para dormir, versus 7,1 en el resto de los alumnos. En matemática, las calificaciones promedio eran, respectivamente, de 6,3 y 7,1, según publica el equipo en Sleep Medicine. —REUTERS