CARACAS. El presidente de Venezuela “se robó el show” cuando él mismo anunció su casamiento con Cilia Flores, quien ha sido parlamentaria, presidenta de la Asamblea Nacional y procuradora general de la República de Venezuela. Ellos contrajeron nupcias el pasado lunes.
La pareja se conoció gracias al fallecido Hugo Chávez, Maduro era el guardaespaldas y Flores su abogada defensora.
Según publicaciones del periódico español abc.es la pareja hizo espacio para pasar dos días de luna de miel en casa del millonario Antonio Lecuna en la isla Margarita.
La celebración se desarrolló en una mansión de ocho habitaciones, amplios salones, un lujoso comedor y en la mesa unos exquisitos erizos al horno y caracoles al limón, bañados con vino. Pero antes, el brindis con cava, no pudo faltar.
El lugar es bastante conocido por ser un espacio de descanso de la clase alta venezolana en el Caribe. El sitio cuenta con una vista espectacular sobre la apacible bahía de Juan Griego, famosa por sus atardeceres. Por eso causó polémica que el presidente socialista decidiera pasar allí su luna de miel. En el pasado Hugo Chávez también la visitó y se alojó en el hotel Isla Bonita, de la cadena española.
En cuanto a la ceremonia, Maduro explicó que Jorge Rodríguez, “el casamentero oficial de la revolución”, fue el encargado de oficiar el matrimonio con la “primera combatiente de la República”, como se refiere a su pareja.
Flores, nacida en el estado de Cojedes, se unió a Maduro, diez años menor que ella, desde los primeros años de militancia chavista, a principios de la década de 1990.
Han sido pareja de hecho sin tener descendencia, aunque ambos tienen hijos de matrimonios anteriores.
En la ceremonia él llevaba una guayabera blanca y ella una falda roja con una chaqueta beige, lo que contrastaba con el sobrio traje negro del alcalde caraqueño.
Las fotografías de la unión las distribuyó después la oficina de prensa del palacio de Miraflores.
La boda sorprendió, pues las leyes civiles de Venezuela obligan a los contrayentes presentar las partidas de nacimiento y actas de divorcio o constancias de soltería, además de notificar públicamente 15 días antes su intención de casarse. —Agencias