En cinco meses, Salud reporta 29 muertes por diarrea

El 80 por ciento de las muertes se registran en niños menores de un año, según datos del Ministerio de Salud

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elsalvador.com

Por Yamileth Cáceres nacional@eldiariodehoy.com

2013-06-03 8:00:00

En lo que va del año 29 personas han fallecido por gastroenteritis aguda en la red de hospitales públicos, una enfermedad prevenible, pero que sigue representando la segunda causa de consulta en el sistema sanitario, superado únicamente por las infecciones respiratorias agudas IRA.

De acuerdo con el informe del Ministerio de Salud (Minsal), 20 de las defunciones se produjeron en niños menores de un año; entre uno y cuatro años ocurrieron seis decesos.

Se desconoce cuántos murieron en sus comunidades por esa causa en este año, el dato no fue proporcionado por el Minsal.

“Entre menor edad tiene un niño, es más vulnerable”, comentó Reyna Hernández, colaboradora técnico médico de la Dirección de Vigilancia Sanitaria del Minsal.

El año pasado a la misma fecha se registran 23 muertes, eso representa un incremento en la letalidad de la enfermedad con relación a este año, pese a que el número de atenciones por esta causa son un diez por ciento menor.

De acuerdo con el Minsal, entre los factores que están detrás de estas víctimas mortales se encuentra la consulta tardía, enfermedades agregadas y la falta de cumplimiento de los medicamentos recetados.

Hernández manifestó que hay casos en que los padres prefieren tratarlos con remedios caseros y se quedan esperando los efectos, eso origina que la salud del niño se complique y llegue grave a los hospitales.

“Los remedios caseros no curan la diarrea, la gente dice ya le di una toma de esto y está allí esperando; eso lo que hace es incrementar el tiempo de espera de la familia para poder ir a pasar una consulta, mientras tanto el niño sigue perdiendo líquido”, dijo la colaboradora técnico médico.

Cuándo un paciente fallece por diarrea se abren muchas interrogantes, opinó el infectólogo particular, Jorge Panameño, tomando en cuenta que los de mayor riesgo de fallecer son los niños y los ancianos.

Entre los cuestionamientos está ¿Cuál era el estado en que se encontraba el paciente al momento de consultar?, ¿Qué tipo de tratamiento recibió?, ¿Cuál era el grado de complejidad del establecimiento de salud donde fue atendido? ¿El centro médico disponía de los insumos y equipo necesario para brindar dicha atención?…

En el Hospital de Niños Benjamín Bloom, en el mismo periodo, informó la defunción de 12 infantes, el 80 por ciento de ellos tenían menos de un año.

De acuerdo con el informe epidemiológico del Minsal, de enero al 18 de mayo, las consultas por diarrea y gastroenteritis aguda se ubican como la segunda causa de consultas en los centros sanitarios de notificación obligatoria.

En ese periodo 146,750 personas fueron atendidas por esta causa. En todo el año pasado hubo 352,308 casos.

“La enfermedad diarreíca aguda ha estado siempre presente en la gama de problemas de salud que afectan de manera endémica a la población salvadoreña, en particular a la niñez en el ámbito rural, en donde causa una alta tasa de mortalidad, particularmente en los dos primeros años de vida”, dijo Panameño.

De acuerdo con el análisis del infectólogo, la causa de la presencia de este problema en el país es multifactorial, pero prevalecen dos aspectos que a lo largo de las décadas han experimentado pocos cambios: la falta de saneamiento ambiental moderno y universal y falta de agua potable, tanto en cantidad como en calidad.

Del total de consultas en lo que va del año, el 41 por ciento corresponden a infantes menores de cinco años.

San Salvador, La Libertad, San Miguel y Santa Ana son los departamentos con mayor consulta por gastroenteritis, estas zonas concentran casi el 70 por ciento de atenciones.

Hernández dijo que los niños son más susceptible a padecer de la enfermedad por que sus defensas están bajas y depende de un adulto para poder implementar medidas que le prevengan enfermarse.

Según la colaboradora técnica del Minsal, cada uno de los establecimientos trabaja en la educación y promoción de las medidas de prevención, y en las zonas identificadas que no hay agua segura se entrega puriagua a las familias.

Panameño considera que para atender el problema de salud la apuesta debe ser proveer de agua potable en cantidad y calidad adecuada, construcción de letrinas adecuadas, una red de acueductos y alcantarillas modernas, reforzar y profundizar la vacunación contra rotavirus que comenzó a aplicarse en 2006.

En una de las salas del Servicio de Pediatría, del hospital Zacamil, permanece María Claros junto a su hijo de dos meses, está ahí desde el domingo por la noche. El bebé fue ingresado con diarrea, vómitos y deshidratado.

Según María, el viernes anterior su hijo comenzó con la gastroenteritis por ello consultó a la unidad de salud de Ciudad Delgado de donde la refirieron al Zacamil, pero en la Emergencia le dieron unas pastillas y lo despacharon porque no tenía signos de deshidratación. El domingo por la mañana regresó al hospital, esta vez los médicos lo atendieron de inmediato y le pusieron suero. “Venía pálido, hasta con los ojos hundidos, pero ya está un poco mejor, dijo la joven.

En la misma sala, estaba Carmen Martínez, luce cansada, está sentada a la par de la cuna donde ha pasado los últimos tres días su hija Grecia de cuatro meses. Ella fue ingresada el lunes por la noche porque los vómitos y la diarrea no cedían. Carmen se preocupó y buscó asistencia médica, primero la llevó a la unidad de salud Barrios en la capital donde la evaluaron. Al ver que la diarrea y el vómito continuaron, prefirió llevarla al Zacamil, ahí le pusieron suero para rehidratarla.

En lo que va del año 6,265 personas han requerido de hospitalización. En las últimas dos semanas se muestra un incremento de los ingresos por diarrea, estas pasaron de 280 a 311 a la semana.