Energizantes naturales para mejorar el ánimo

Más allá del café existen otras alternativas con propiedades similares, como el noni y el ginseng. Es recomendable consumirlos pero con medida

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elsalvador.com

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2013-05-25 8:00:00

Si bien la cafeína es el energizante natural por excelencia, no quiere decir que sea al único recurso para evitar la fatiga y el agotamiento.

Ana Cristina Gutiérrez, asesora nutricional, explica que “existen sustancias llamadas energizantes naturales, que ayudan a eliminar el cansancio y mejorar nuestro estado de ánimo. Sin olvidar, claro está, que son los hábitos saludables de vida, los que mejoran nuestros estados de energía”.

Estos productos o sustancias naturales pueden dar beneficios de forma rápida o mediante su consumo regular. “Entre los energizantes naturales podemos encontrar: polen, ginseng, guaraná, ginkgo biloba, maca, noni, hierba mate, jengibre. Además de algunas hierbas naturales como el perejil, romero, canela, menta y el té verde”, destaca la nutricionista.

En el mercado se encuentran diferentes productos que pueden brindar energía y al mismo tiempo aportan distintos beneficios para el organismo. Tal es el caso de los tés concentrados de hierbas.

Pero también debe tener claro que no es bueno excederse, ya que un energizante natural le aportará energía en dosis moderadas y sin efectos secundarios si lo consume adecuadamente.

“Es bien conocido que no debemos abusar del consumo de bebidas energéticas, dado su alto contenido de cafeína. Es importante no mezclarlas con alcohol, medicamentos como aspirina u otros, ya que podría causar efectos secundarios tales como la taquicardia, sudoración o aumento de la presión arterial”, explica Gutiérrez.

Aunque estas bebidas no producen adicción como las bebidas alcohólicas, puede existir una dependencia a ellas, ya que el cuerpo se puede acostumbrar físicamente a consumirlas para tener energía.

Estas bebidas no deben ser consumidas por niños, ya que las concentraciones son mayores de las recomendadas para este rango de edad. Tampoco deben ser ingeridas por personas diabéticas, hipertensas y con enfermedades crónicas, sobre todo cardíacas. —EDH