Con vestidos monocromáticos inspirados en la arquitectura italiana y rascacielos espejados comenzó el pasado viernes la Semana de la Moda de Londres. Así, los diseñadores mostraron creaciones elegantes y minimalistas para la temporada otoño – invierno 2013.
La diseñadora británica Zoe Jordan abrió el circuito internacional de la moda con vestidos grises corsés y faldas fluidas, salpicadas con toques de bits de color ámbar brillante y piel.
Arquitecto de formación, Jordan dijo que las catedrales italianas y el horizonte urbano de Hong Kong inspiraron las siluetas y los detalles metálicos afilados de sus creaciones.
“Vivir entre estos rascacielos metálicos, reflejados todo el tiempo, sin duda cambia la visión un poco”, expresó Jordan, que regresó recientemente de un viaje a Hong Kong.
“Lo que estamos tratando de hacer es que el glamour sea algo diferente porque Londres es una ciudad que trata diferente a las chicas”, opinó Jordan de su colección.
Esta es una de las cuatro pasarelas de moda más importantes, junto con París, Nueva York y Milán, porque ahí nacen nuevas tendencias de vanguardia.
La ciudad ofrece una mezcla prometedora con los diseñadores veteranos como Vivienne Westwood, en una explosión de creatividad semestral para atraer de nuevo a las tienda a los consumidores cansados de la recesión.
Por otra parte, el blanco y negro se hizo eco con el dúo de diseñadores Fyodor Golan (Fyodor Podgorny y Frydman Golán), que presentó una colección de negro, marfil y calabaza quemado, adornados con diseños barrocos o con cuentas.
También hay que destacar las faldas y vestidos sutilmente sexy, manteniendo los muslos y los pechos cubiertos mientras que exhiben los hombros y el cuello.
“Para nosotros se trata de la sexualidad –explotarla y mostrarla, pero de una manera perversa– solo la perseguía”, declaró Podgorny.
De cara al futuro, el centro de atención estará brillando en el diseñador estadounidense Tom Ford, quien mostrará su colección de moda femenina en la pasarela por primera vez en Londres, con un público limitado para unos pocos iniciados y editores de revistas de moda.
La cantante Rihanna le dio ayer un toque de glamour con el lanzamiento de su primera colección de ropa para la tienda británica River Island, uno de los 56 desfiles que tienen lugar durante todo el evento de cinco días.
“Moda de Londres es sinónimo de locura porque tienes nuevos diseñadores, tienes la moda sofisticada, esto es un centro para mostrar el talento”, puntualizó la actriz Jaime Winstone.