Difícil saber en EE.UU. costo de reemplazo de cadera

Aproximadamente el 15% de los hospitales no proporcionaron ninguna estimación de precio, incluso después de que un investigador les llamó hasta cinco veces

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elsalvador.com

Por AP

2013-02-12 2:00:00

Una cirugía usual de reemplazo de cadera a un paciente saludable sin seguro de gastos médicos podría costar desde 11.000 hasta casi 126.000 dólares.

Eso es lo que encontraron los investigadores tras comunicarse con hospitales de todos los estados, 122 telefonemas en total, a los que les preguntaron cuánto tendría que pagar una mujer saludable de 62 años para obtener una cadera artificial. Se le dijo a los hospitales que la supuesta paciente era la abuela de quien hacía la llamada y que carecía de seguro médico pero podía pagar de su bolsillo, razón por la cual era tan importante saber el costo con anticipación.

Aproximadamente el 15% de los hospitales no proporcionaron ninguna estimación de precio, incluso después de que un investigador les llamó hasta cinco veces.

Los investigadores pudieron obtener un cálculo completo de precios, incluidos los honorarios del médico, en cerca de la mitad de los hospitales. Pero en la mayoría de los casos fue necesario contactar al hospital y al doctor por separado.

“Con frecuencia nuestras llamadas a los hospitales fueron recibidas con incertidumbre y confusión”, escribieron los investigadores. “Frecuentemente nos transfirieron a otros departamentos, se nos pidió que dejáramos mensajes que pocas veces fueron devueltos, y nos dijeron que no era posible calcular los precios si no hacíamos una visita a un consultorio”.

Muchos hospitales “simplemente no están listos” para atender cuestiones de costos, dijo Jaime Rosenthal, estudiante de la Universidad de Washington y coautor del informe.

La mayoría no ocultan los costos en forma intencional, sino que no están acostumbrados a que los pacientes pregunten sobre ellos. Eso es especialmente cierto entre los pacientes con seguro de gastos médicos que “no se molestan en preguntar porque saben que el seguro lo cubrirá”, dijo el doctor Peter Cram, investigador de la facultad de medicina en la Universidad de Iowa y otro coautor del estudio.

Pero consideró que probablemente eso cambie a medida que los empleadores obligan cada vez más a los trabajadores a compartir más costos en el cuidado a la salud al pagar deducibles más elevados, así como a aportar más a los pagos que eroga el empleador, lo que hace que los pacientes se sientan más motivados a preguntar sobre los costos.

El estudio fue publicado el lunes en el sitio en internet de la revista JAMA Internal Medicine. Una investigación de California publicada el año pasado sobre la apendicectomía halló disparidades similares en los costos.

Al comentar el estudio, Marie Watteau, portavoz de la Asociación Estadounidense de Hospitales, dijo que éstos “tienen un conjunto uniforme de cobros. Sin embargo, compartir información significativa representa un desafío porque la atención hospitalaria es única según el paciente, basada en las necesidades específicas de cada uno”.

Dijo que los estados y las asociaciones locales de hospitales son la mejor fuente para obtener precios, y que muchos estados ya requieren o alientan a los hospitales a que reporten la información sobre precios y a que pongan esa información a disposición del público.