Nueva terapia de rehabilitación visual

El programa inició la semana pasada y se implementará en todas las sucursales de Fudem

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elsalvador.com

Por Hasmed Sermeño Twitter: @hasmedjs

2013-01-18 7:00:00

Padecer una afección oftalmológica que reduzca significativamente la calidad de visión y cuyo diagnóstico médico sea que no pueda ser mejorado con intervenciones quirúrgicas o tratamientos refractarios no significa que ese caso no se pueda tratar.

Así lo afirman expertos en salud visual de Fudem.

“Existen casos en que el paciente no tiene cura. Sin embargo existen terapias que aunque no incrementen su visión le permiten aprovecharla al máximo”, comentó María Asunción Betancourt, optómetra de Fudem.

Se trata de una novedosa terapia denominada “Rehabilitación visual”, la cual fue puesta en marcha la semana pasada en Fudem y que pretende mejorar la calidad de vida de las personas con baja visión.

Novedosa terapia

El programa funciona con un equipo conformado por un oftalmólogo, optómetra, terapeuta visual y sicóloga con el objetivo de brindar una atención integral.

Los pacientes que deseen recibir la terapia deben someterse a un proceso evaluativo y reunir características como una baja visión certificada, explicó la optómetra.

El primer paso es consultar con un oftalmólogo, quien determinará si la persona presenta algún problema que no pueda ser tratado quirúrgica u oftalmológicamente.

Luego deberá ser evaluado por un optómetra, quien se encarga de determinar qué nivel de visión tiene el paciente.

Esta parte es importante porque las personas tienden a confundir la baja visión con la ceguera y es prioritario acabar con el mito de que “entre más se use la poca visión más se desgasta”, pues es todo lo contrario. El ojo es como un músculo. Ssi no se ejercita se atrofia, dijo la especialista.

“Lo ideal de agudeza de visión en una persona es 20/20; si presenta 20/70 o inferior a ese porcentaje es calificado como un paciente con baja visión y puede optar por la rehabilitación visual”, explicó Betancourt.

Una vez certificado con baja visión, el paciente es atendido por una terapeuta visual que le enseñará cómo manipular las herramientas (lupas y telescopios), a qué altura deberá colocarlas, cuál es la postura correcta, etc.

“Cuando no hay nada que hacer con filtros, lupas o telescopios damos ‘orientación de la vida diaria’, por ejemplo cómo usar un bastón para que no tropiece o cómo hacer contrastes para mejorar su movilidad en un espacio”, dijo la optómetra.

Finalmente se trabaja con la sicóloga, quien realiza terapias que ayuden a estabilizar emocionalmente al paciente. En la asesoría sicológica se tratan a niños y adultos con terapias personalizadas e individualizadas.

Sin embargo, en el caso de los niños y adolescentes se incluyen a los padres, según lo explicó Vanessa Cornejo, sicóloga del programa.

“Se trata de incluir a los padres porque generalmente son los más afectados, pues ven la afección de su hijo como algo devastador y adoptan una actitud de duelo, por lo que tienden a aislar a sus hijos y esto conlleva a bajarles el autoestima y entorpece los procesos sicosociales del niño, minando la formación de su personalidad”, explicó Cornejo.

En el caso de los adultos, lo más difícil es romper los esquemas mentales y el sentimiento de duelo.

Para mayor información sobre este programa de rehabilitación visual debe comunicarse con Fudem al teléfono 2298-4433.Para mayor información sobre el programa de rehabilitación visual comuníquese con Fudem al 2298-4433.