Un lugar donde la luz se convirtió en religión

[Las vegas, la meca del entretenimiento] Con sus 175 establecimientos hoteleros, casinos y complejos de diversión, esta ciudad estadounidense hace que coincidan el placer, la suerte y algo más.

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elsalvador.com

Por Texto y Fotos: Juan José Morales

2013-01-17 8:00:00

Miles de turistas caminan sobre la acera de una célebre calle. Asiáticos, afrodescendientes, latinos sacan de sus bolsos sus cámaras fotográficas y retratan para la inmortalidad el caudal de eclecticismo que tienen frente a sus ojos. Pero antes advierten: “lo que pasa en Las Vegas se queda en Las Vegas”. Yasí justifican su ir y venir, entre casinos, lujo y glamur, excesos incluidos. Todo en medio del desierto, ario y seco. Detalle que sorprende. Pero así es.

La ciudad del pecado es el nombre que le dan los no creyentes, aquellos que llegan y simplemente disfrutan. Pero otros, los que creen en que la luz marca el camino al cielo la invocan como La Capital de las Segundas Oportunidades. Por eso es que Las Vegas es una urbe llena de diversión y entretenimiento: porque es el lugar donde pocos se hacen millonarios y muchos llegan a buscar indulto por el estrés cotidiano.

Una ciudad con esta connotación debe tener, como otras de corte cosmopolita, una enorme avenida, bulevar o algo que se le asemeje. Esta es el Bulevar Sur, específicamente la iconoclasta Franja de Las Vegas (Las Vegas Strip) donde están ubicados los grandes hoteles, casinos, centros comerciales y las mil y un atracciones que hacen que los turistas nunca duerman. Al menos en apariencia.

Cada lugar es un concepto, un viaje por globo terráqueo. El Cesars Palace le rinde homenaje a Roma con Nerón César incluido. NewYork-New York es la recreación de los rascacielos, la estatua de La Libertad y el puente Brooklyn. Y París, pues es eso:réplicas de la torre Eifel, el arco del Triunfo y la Plaza de la Concordia. Todo se vuelve temático.

En todas estas instalaciones las máquinas tragamonedas y los múltiples juegos de azar como el “black jack”, póquer y la ruleta son el detalle en cada metro de ese mundo donde no hay límites. Por ello, el aderezo deben ser los centros comerciales, con cielos pintados, fuentes conceptuales y tiendas al servicio de la moda y las últimas tendencias de la tecnología.

La arteria, incluida en la lista de lugares escénicos nacionales de Estados Unidos, es una sección de casi seis kilómetros donde estos 18 de estos recintos se suman a la lista de los 25 mayores hoteles del mundo, según coinciden diversas fuentes especializadas en turismo consultadas.

Hay que destacar, para los románticos, el Venetian Hotel y su centro comercial de grandes canales venecianos donde se pueden realizar paseos en góndola para ir de tiendas a restaurantes o las fuentes rítmicas del hotel cinco diamantes Bellagio, casa de producción del famoso espectáculo del Cirque du Soleil.

Para los que disfrutan de caminar, recorrer a pie el “Strip” es una excelente opción, sobre todo para entrar y salir con comodidad de estos aposentos y sus fachadas como el volcán del Mirage y las sirenas del Casino Treasure Island.

La otra alternativa es abordar el Las Vegas Monorrail, un sistema de vagones suspendidos que tiene diferentes estaciones en los hoteles y casinos.

Entre los otros detalles que se pueden encontrar en Las Vegas están la tienda oficial de Coca Cola con forma de botella gigante de cristal, canchas de golf, piscinas con olas y múltiples escenarios de películas clásicas y contemporáneas.

Así es Las Vegas, una meca donde el día se junta con la noche y se vuelve cómplice del destino divertido y placentero de sus millones de turistas aventureros y atrevidos.