SAN SALVADOR. Todos celebraban, pero para cada jugador albo, esta conquista tenía un significado especial.
Rodolfo Zelaya, quien al minuto 22 de partido recibió un homenaje de la afición, con una pancarta y un minuto de aplausos, mencionó: “(Voy) contento con la victoria y el bicampeonato, y ahora a disfrutar con esta linda gente que nos apoya… Emocionalmente no estaba bien, pero tenía el deseo de estar aquí y apoyar (al club)”.
En varios momentos de la celebración el jugador estuvo sentimental, llorando y abrazando a su hijo, a quien cargaba en brazos.
Sin olvidar lo que ocurrió la semana anterior, con el accidente de tránsito que sufrió, dijo: “Le dedico a Dios esta victoria y luego a la familia de Vannessa (Argueta), por lo que sucedió”.
A Fito, sus compañeros de equipo también lo homenajearon, con una pancarta que mostraron en el momento que salieron del camerino y luego del partido, levantándolo en hombros.
Por su parte, Iván Mancía lo vivía de manera especial, al ser el primer jugador en torneos cortos que consigue cuatro títulos al hilo, dos con Santa Tecla y otros dos con los paquidermos: “Me siento muy contento que de manera personal estoy celebrando un tetracampeonato. Esto es lo más lindo que como jugador podés tener”, señaló.
Desde las gradas, Henry Romero, quien no jugó por sanción, y Rubén Marroquín, por lesión, también celebraron de manera efusiva, luego de vivir el partido con mucho sufrimiento.
“Es difícil estar en las gradas en un partido así. Es la segunda vez que me pasa y literalmente te toca ‘socar’ mucho desde ahí”, dijo “Catracho” Romero, quien se perdió la final pasada por lesión.
Mientras, “Polaco” manifestó: “Me dolió perderme este partido. Se sufre más desde las gradas, pero confiaba en el trabajo de mis compañeros y por ello me siento orgulloso de formar parte de este grupo”.
Entre lágrimas
Apartado del grupo, dando una melancólica vuelta a la cancha, Rudy Valencia se despidió de los aficionados aliancistas, ya que ha decidido dejar al equipo para buscar nuevos aires.
Valencia, con la voz entrecortada y lágrimas, expresó: “Me siento muy agradecido con Dios, con la directiva, cuerpo técnico y mis compañeros de equipo, porque se me da la oportunidad de ser bicampeón, de disfrutar de todo esto. Es lindo sentir todo el cariño de esta gente”.
El contención dijo que se habían caído dos negociaciones en el extranjero. En el país no tiene nada seguro, pero escuchará ofertas.
Y el guaraní Gustavo Guerreño aseguró que no seguirá de albo al terminar contrato y su destino sería otro equipo salvadoreño: “Me gusta la forma de la que me voy de este equipo, con quien hicimos historia”, dijo el delantero.